Agua para el desierto de Los Monegros
66.000 hectáreas de Zaragoza y Huesca tendrán riego tras una inversión de 87.000 millones
Las tierras áridas y semidesérticas de la comarca de Los Monegros, en las provincias de Zaragoza y Huesca, se tornarán en el futuro verdes y fértiles. El Consejo de Ministros aprobó el día 1 de este mes el Plan General de Transformación en Regadío de la segunda parte del canal de Monegros, que incluye las obras precisas para regar 66.000 hectáreas. Las inversiones en los próximos 20 años serán superiores a los 87.000 millones de pesetas y se podrán crear unos 3.400 empleos permanentes. Los habitantes de estos pueblos monegrinos llevan esperando el agua desde 1915.
La comarca de Los Monegros debe su nombre, según escritos del siglo XVIII, "a la abundancia de pinos y sabinas que poblaban su suelo" y que vistos desde lejos se semejaban a unos montes negros. Los árboles se arrancaron para la explotación del carbón vegetal y poder cultivar las tierras; ahora, tal como reconocen muchos, "ni árboles ni agua". Se trata de la comarca española con menor índice pluviométrico y ésta ha sido la única razón de su pobreza tradicional y de la regresión demográfica. En unos 2.500 kilómetros cuadrados de tierras semidesérticas viven unos 25.000 habitantes, con una densidad media de 10 habitantes por kilómetro cuadrado, aunque desigualmente distribuidos.Los habitantes de Alforque, Bujaraloz, Caspe, Farlete, Jelsa, La Almolda, Monegrillos, Pina de Ebro, Sástago y Velilla de Ebro, de la provincia de Zaragoza, y los de Ballobar, Candasnos, Fraga, Ontiñena, Peñalba, Sena, Valfarta y Villanueva de Sigena, de Huesca, cuyos términos municipales se beneficiarán del plan de regadíos, llevan 70 años esperando el agua. El 7 de enero de 1915 se promulgó la ley de Riegos del Alto Aragón, que autoriza al Gobierno la ejecución de las obras para regar las zonas de Sobrarbe, Somontano y Los Monegros. Se preveía un plazo máximo de ejecución de 25 años.
Respecto a Los Monegros, el canal que lleva el mismo nombre riega en la actualidad, en sus tres primeros tramos, 32.400 hectáreas, cuyas obras de transformación están terminadas. Falta por concluir el cuarto tramo del canal, cuyas obras están muy avanzadas, confiándose en que este año el agua llegue, mediante un túnel impresionante, al otro lado de la sierra de Alcubierre. La división de la zona regable en Monegros I y Monegros II se debe precisamente a la existencia del muro natural y psicológico, hasta ahora casi insalvable, de la sierra de Alcubierre.
Monegros II posibilitará regar cerca de 66.000 hectáreas de una zona delimitada de 230.000 hectáreas que afecta a 12 términos municipales de la provincia de Zaragoza y 10 de la de Huesca. Se han escogido las tierras de mayor potencial y menor riesgo de salinización y de erosión para el regadío. El Plan General de Transformación, aprobado por el Consejo de Ministros, supone la puesta en marcha de las previsiones incluidas en la declaración de la zona como de interés nacional, decretada el año pasado.
De forma inmediata habrá de iniciarse una serie de obras de infraestructura: acequias, embalses, líneas eléctricas, colectores, caminos rurales, urbanización de los núcleos de población, redes de tuberías y desagües, dependencias agrícolas, viviendas y cooperativas. El plazo marcado para que las tierras puedan ser regadas por aspersión y las obras señaladas estén terminadas es de 20 años. A los agricultores les parece excesivo este tiempo y la Comunidad de Regantes Expectantes envió un escrito al presidente del Gobierno, Felipe González, invitándole a visitar la zona para que escuche las razones por las que, en su opinión, deben agilizarse los plazos.
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