No seas 'sid-SIDA'

Por muy erudito que sea uno, entiende que las posturas radicalizadas nunca llevan a buen puerto. La historia, pozo inagotable de sabiduría, así nos lo demuestra y ratifica. Más vale una política informativa y preventiva, sin tabús ni segregaciones, que unas leyes represivas disfrazadas de ágel salvador. Verbigracia: la sentencia dictada por el Supremo de EE UU de penalizar con 20 años de prisión a los practicantes del sexo oral; todo ello producido por la psicosis del fantasma llamado SIDA. ¡Viva el derecho a la intimidad! Ni nuestra "purificadora" Santa Inquisición de la Edad Media lo hubiera hecho rnejor. Tío Sam: me recuerdas cada día al más fanático ayatollah. ¡Alucinados nos tenéis! Que la flecha de Cupido nos proteja de esta casta aureola. Centrando el SIDA en Cataluña, según datos de la Generalitat, se aprecia que el porcentaje de casos y víctimas es más de tipo sexual, que de drogas y hemofilico. Creo pues, deberíamos reflexionar y matizar aspectos, para llegar a alguna(s) conclusión(es): -Que opinas se ha mitificado el tema y han hecho causa común, esos poderes fácticos, tan arraigados en este país (es posible, "a perro flaco todo son pulgas"). Que te parece que el amor es libre, sin impoortar ¿el sexo? (me parece; "cadacual tiene sus gustos"). ¿Que el acto sexual es un arte y como tal, no tiene límites ni fronteras? (OK, "hay mucho inculto suelto"). ¿Que el Karnasutra es tu biblia? (itampoco te pases!). En definitiva: ¿que tu lema es hacer el amor y no la guerra? (tope guaí tío/a). Sin embargo permíteme que te proponga otro, mucho más extensivo y válido; ya que a la vista de los datos aparecidos sobre el virus, y los que se prevé habrán, me parece más acertado: "Vive y deja vivir". Ojalá todo el mundo tuviera este gran ideal. Sé consecuente con el problema, porque existe. No adoptes una actitud pasota, como si oyeras un canto gregoriano, pues de lo contrario puede escuchar un canto fúnebre, en honor a tu memoria y a tu imprudencia. A la espera de que salga esa vacuna que al parecer va para rato, sexualiza como quieras y con quien quieras, pero con las debidas precauciones. De ti depende el convertir esto en una plaga, y en una cruzada para los sectores más ultras, más convencionales y más obtusos; que andan al acecho-