Fraga propone que se castigue la Intencionalidad terrorista"

El presidente de Alianza Popular, Manuel Fraga, propuso ayer 10 medidas -básicamente consistentes en un endurecimiento legal de las penas- para acabar con el terrorismo. En su discurso de respuesta al de investidura pronunciado el día anterior por Felipe González, Fraga aseguró que la credibidad de Gobierno "está bajo mínimos" y concluyó haciendo un canto a la necesidad de que las fuerzas de oposición se unan, integrándose en la "mayoría natural" de la que Fraga llegó a citar explícitamente un ejemplo: la Coalición Popular.

Fraga, con tono mesurado, aunque comiéndose muchas palabras, resaltó que la sesión de investidura no se ha producido en un clima de ilusión popular: "Hay demasiados atentados y parados para que ello sea posible". Al inicio de los casi 45 minutos que estuvo hablando, no olvidó hacer alusión indirecta a la conveniencia de ilegalizar a Herri Batasuna.La parte más importante del discurso de Fraga estuvo dedicada a sus 10 medidas antiterroristas, que incluyen modificar la ley antiterrorista y crear un nuevo delito autónomo, el de apoyo al terrorismo. Dicha ley debe, en opinión de Fraga, modificarse para declarar ilícitos a los partidos políticos que apoyen de cualquier forma al terrorismo. También propone Fraga modificar el Código Penal, introduciendo la agravante de "intencionalidad terrorista". Este código debe modificarse también, dijo, en lo relacionado con el indulto, excluyendo Medidas de gracia para los culpables de delitos de terrorismo, que deben cumplir la totalidad de las penas.

Otra de las medidas consistiría en una modificación de la ley general penitenciaria, de manera que se excluyese de los beneficios de prisión abierta a los condenados por delitos terroristas.

De acuerdo con el decálogo de Fraga, también debe modificarse la ley de Enjuiciamiento Criminal, para conceder una mayor protección a los testigos y atribuir competencias al fuero normal a la hora de juzgar a los miembros de las fuerzas de seguridad con motivo de actividades policiales en contra del terrorismo. Otras medidas consistirían en crear la figura de un fiscal especial para delitos terroristas, la dotación de mayores presupuestos para subvenciones a las víctimas del terrorismo, y el establecimiento de un control parlamentario sobre reinserción de terroristas arrepentidos.

Fraga criticó también la política económica seguida hasta ahora por el Gobierno socialista, especialmente en lo referente al déficit público y la presión fiscal. "Desbarajuste económico" fue el resumen que el líder conservador hizo sobre la actuación socialista.

El discurso de Fraga, aplaudido por los diputados del Grupo Popular, pero no por los democristianos del Partido Demócrata Popular (PDP), se fijó también de manera especial en la televisión, "tema rigurosamente eludido" por González en su intervención del martes.

"El candidato debe comprometerse a fijar unos plazos muy concretos para la reforma del estatuto de RTVE y la puesta en marcha de la televisión privada", dijo el dirigente conservador. El "imperio de la dedocracia" fue otro capítulo de la crítica de Fraga, quien aseguró que casi 19.000 puestos de funcionarios han sido nombrados a dedo en los últimos dos años.

Luego abogó por un modelo para España semejante al norteamericano o el japonés, rechazando el modelo de "social democracia a la sueca" que, según Fraga, es el que parece seguir el PSOE. "La legitimidad de ejercicio", dije, mirando a González, "es tan importante como la de origen", concluyó, reiterando sus ofertas al, Gobierno para un pacto de Estado en las "grandes cuestiones": política exterior y social, educación y, gasto público, pero también se mostró dispuesto a "escuchar cualquier propuesta razonable" sobre otros temas.