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Las bolsas se mantienen a la expectativa

La sesión de apertura de los mercados de valores ya contaba Con una noticia negativa en su haber, la escalada del índice de precios al consumo en, el mes de junio, que ha demostrado que la inflación está bastante lejos de ser controlada. El 5,2 que se ha alcanzado en el mes pasado sitúa el incremento de los precios siete centésimas por encima del mismo período en el ejercicio anterior, lo que supone que el nuevo Gobierno va a seguir contando con este asunto como tema prioritario para esta legislatura, pues parece cada vez más difícil que se consigan los objetivos previstos. Esta situación favoreció una apertura en la que fueron pocos los valores que consiguieron dejarse llevar por la inercia de las últimas sesiones.El ambiente era propicio para que la escalada de la violencia terrorista restase importancia a lo que estaba sucediendo en los corros. Los ánimos se fueron enfriando y los pocos inversionistas que venían con intenciones de efectuar alguna operación lo dejaron para otro día. Así las cosas, los mercados continúan sumidos en ese extraño equilibrio entre oferta y demanda, sin que la arbitrariedad o las noticias económicas negativas consigan sacar de sus casillas a unos inversionistas que siguen esperando que se imponga la lógica en todos los terrenos.

El nivel del negocio continúa estancado en torno a los 3.000 millones de pesetas, aunque en esta última sesión el sector bancario ha aumentado sensiblemente el número de títulos negociados por los siete grandes valores del grupo. Casi 280.000 títulos responden del interés que muestran los inversionistas por estos valores, y ello a pesar de que los. restos vendedores vuelven a imponerse. El equilibrio entre compras y ventas se ha inclinado en esta ocasión del lado vendedor, aunque, como viene siendo habitual, con cifras muy reducidas. Los resultados fueron, asimismo, dispares, pues se dieron dos repeticiones, avances entre cinco y 10 enteros y retrocesos entre siete y 28.

Los valores eléctricos acusaron más el enfriamiento del ambiente, y a los discretos avances de los primeros corros les siguió un fuerte descenso en Ja actividad y en la trayectoria de los precios. También los sectores industriales se vieron afectados por este cambio de actitud, y la mayoría de las cotizaciones se orientaron a la baja, aunque casi nunca con pérdidas importantes. Telefónica cedió algo más de dos enteros, y los índices generales de los cuatro mercados muestran la desorientación que padece la renta variable, pues mientras que Barcelona y Valencia suben 1,27 y 0,97 puntos, Bilbao y Madrid bajan 14 y tres centésimas, respectivamente.

Por otra parte, Vacesa abonó a sus accionistas un dividendo, a cuenta del presente ejercicio, de 35 pesetas netas, que recuperó íntegras, mientras que Unión Europea de Inversiones descontaba las 61,50 pesetas que pagaba como dividendo complementario. La Sociedad de Aparcamientos de Barcelona (Saba) inició una ampliación de capital, gratis para los accionistas, en la proporción de una acción nueva por cada 10 antiguas, cotizándose los derechos a 375 pesetas en el mercado catalán, y descontando las acciones de este importe junto con 2,5 enteros.

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