Arabia Saudí no reducira su producción hasta que exista un compromiso dentro de la OPEP

Arabia Saudí, cuya política de incrementar sus ventas ha provocado la baja de los precios que experimenta el mercado mundial de petróleo desde primeros de año, no tiene ninguna intención de reducir su producción hasta que el resto de productores no llegue a un acuerdo global para regular conjuntamente el mercado, según declaró ayer en Brioni el jeque Zaki Yamani, ministro del Petróleo saudí. En el primer día de la 78ª conferencia de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), los 13 países miembros eligieron al ministro nigeriano del Petróleo, Rilwanu Lukman, como nuevo presidente del organismo.

Las palabras de Yamani, que coinciden básicamente con el mensaje dado días antes por el ministro noruego de Energía, Arne Oeien, tras mantener el domingo pasado una reunión de cuatro horas en Venencia con el ministro saudí, alejan momentáneamente la posibilidad de que la OPEP llegue a un acuerdo rápido para restablecer el precio del crudo.El consorcio busca. desesperadamente desde hace unos meses propulsar hacia arriba el precio del petróleo, que ha caído desde cotas superiores a 30 dólares en el pasado mes de diciembre. El mercado libre para el brent, pese a su escasa actividad, reaccionó ayer con una nueva baja ante la declaración de Yamani de mantener sus ventas en torno a 4,35 millones de barriles diarios. Los precios, que hace una semana estaban en torno a 14 dólares, cayeron ayer por debajo de los 11,25 dólares para entrega inmediata.

Los asistentes a esta 78ª conferencia eligieron ayer como nuevo presidente de la OPEP al ministro nigeriano del Petróleo Rilwanu Lukman. La elección de Lukman, de 48 años de edad, contó con el apoyo unánime de los miembros del organismo.

El nuevo presidente replaza en el puesto al venezolano Arturo Hernández Grisanti. Venezuela también se mostró ayer pesimista sobre la posibilidad de alcanzar un acuerdo que limite la producción y estimule los precios. En su discurso, Hernández Grisanti dejó bien claro que la OPEP "no está dispuesta a realizar por sí sola los sacrificios necesarios" para estabilizar el mercado. El venezolano resaltó que tienen que ser los productores no asociados al consorcio, especialmente los industrializados (Reino Unido y Noruega) los que den el primer paso para reducir la oferta.

En su última reunión ordinaria, celebrada en Ginebra el pasado diciembre, la OPEP modificó radicalmente su estrategia anterior de mantener el precio a costa de reducir la producción y asumió una nueva que, bautizada como guerra de precios, consistía en recuperar una cuota justa del mercado mundial de crudo para el cártel a base de inundar los países consumidores con crudo barato. La estrategia provocó una histórica caída del precio del crudo, que llegó a descender por debajo de los 10 dólares.

La incógnita del cambio

Al reunirse de nuevo en Brioni, tras el fracaso de su conferencia extraordinaria celebrada en la. capital suiza durante los meses de marzo y abril, el único interrogante planteado es si el cártel considera factible un cambio de su estrategia con el fin de restablecer el precio, una vez alcanzadas unas ventas globales en el mes de junio superiores a 19 millones de barriles diarios, un 15% más que la que tenían en el mismo mes del pasado año.

La impresión existente ayer en medios de la conferencia, tras las claras palabras de Yamani y Grisanti, es que la OPEP está inclinada mayoritariamente en mantener la guerra de precios. Ayer se supo que el ministro noruego de Energía no llegó a un acuerdo definitivo en su entrevista el pasado domingo con Yamani y que sólo ofreció colaborar con la OPEP una vez ,que el cártel se haya puesto de acuerdo internamente en el volumen de producción justo, en el reparto individual de este volumen de producción y, por último, certifique diariamente que está cumpliendo sus acuerdos.