Un transeúnte de 30 años muere de un disparo realizado por un atracador

Antonio Romera Morant, de 30 años, falleció en la noche de ayer al ser alcanzado por un disparo efectuado por un hombre que acababa de asaltar un taller de reparación de Citroën, situado en la calle de Abtao, en el distrito de Retiro, según informó la policía. José Luis Martínez Fernández, el supuesto agresor, fue detenido poco después en la calle del Doctor Esquerdo, en medio de un tiroteo, en el que resultó herido. La víctima, que paseaba tranquilamente por la calle, se cruzó en el camino de su agresor cuando éste trataba de escapar, perseguido por uno de los empleados.

El suceso se inició sobre las ocho de la tarde, cuando un hombre que actuó a cara descubierta y que iba armado con un revólver atracó un taller de reparación de Citroën, situado en el número 9 de la calle de Abtao. Tras apoderarse del dinero que se encontraba en la caja, el asaltante inició la huida perseguido por uno de los empleados. El atracador efectuó un disparo que alcanzó a Antonio Romera, que pasaba por la zona, ajeno a lo que sucedía. La víctima, que falleció en el acto, quedó tirada en el suelo y algunas personas vieron cómo el asaltante escapaba corriendo por la calle de Valderribas.Poco después, un coche zeta de la comisaría de la Estrella localizó al supuesto agresor en la calle del Doctor Esquerdo, a la altura del número 170. Al tratar de identificarle, el supuesto homicida sacó un revólver y se inició un tiroteo en el que resultó herido el atracador, alcanzado por una bala en el glúteo derecho.

Un testigo presencial del intercambio de disparos entre la dotación policial y el presunto homicida aseguró que escuchó cómo los agentes le daban el alto.

"Por respuesta, el chico sacó una pistola y empezó a disparar", explicó el testigo. "Los policías se tiraron al suelo y se protegieron detrás de un coche. Poco después lograron alcanzarle de un balazo. Cuando estaba tirado en la acera fue detenido y me pareció que estaba herido en una pierna porque tenía el pantalón manchado de sangre. Escuché también cómo uno de los policías dijo, comentando el incidente y refiriéndose al herido, que por lo menos de ésta se iba a quedar cojo", añadió.

El mismo testigo manifestó que escuchó al menos cinco impactos y que se produjeron momentos de verdadero pánico y de desconcierto entre la gente que pasaba por la calle en ese momento.

El herido, que fue identificado como José Luis Martínez Fernández, de 32 años, fue trasladado al Hospital Provincial, donde permanecía ingresado anoche. Fuentes del citado centro sanitario calificaron la herida como menos grave.

La policía se incautó de un revólver Marca Astra, del calibre 38 especial, con cinco cartuchos, cuatro percutidos y uno completo. El detenido portaba también dos carnés de identidad, uno falso y el otro supuestamente suyo, que corresponde a la identidad citada.

El revólver de un vigilante

Al parecer, el revólver que le fue aprehendido le había sido sustraído presuntamente a un vigilante jurado, aunque se desconocían las circunstancias en las que esto ocurrió. Un portavoz de la Jefatura Superior de Policía aseguró que se carecía de más información sobre el supuesto homicida, puesto que se estaban realizando diligencias en la comisaría de la Estrella.La Jefatura Superior de Policía desconocía también todo tipo de datos sobre la persona fallecida, que pudo ser identificada por la documentación que portaba. Antonio Romera falleció en el acto. Su cuerpo fue trasladado al Instituto Anatómico Forense para practicarle la autopsia.