Los pilotos aceptan el arbitraje propuesto por Aviaco
El Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (SEPLA) aceptó ayer en asamblea el arbitraje propuesto por la dirección de Aviaco para solucionar el conflicto entre empresa y pilotos, que provocó la pasada huelga de cinco días. El SEPLA indicó que si la empresa acepta las condiciones expuestas por el sindicato para la realización del arbitraje, los paros programados para los días 19 y 20 de junio quedarían desconvocados.Los pilotos piden que el árbitro se designe de mutuo acuerdo entre las partes y sea una persona "con notable solvencia jurídica y probada independencia". La designación del mediador se efectuará tres días después de que la empresa sea informada, y la resolución se adoptará en un plazo de 15 días contados desde la designación y aceptación.
Otras condiciones del sindicato de pilotos son que la decisión arbitral, sea la que sea, se lleve a efecto inmediatamente. después de darse a conocer, así como que se sometan al arbitraje los temas relaciohados con la huelga.
En Spantax, el conflicto continúa estacionario. Dos pilotos han sido denunciados por el comité de empresa por presuntas irregularidades relacionadas con la seguridad en el vuelo. Ayer se cancelaron 44 vuelos de Spantax y tres de Aviaco, compañía que hoy no estaba afectada por los paros, pero que sufre las consecuencias de programación a que ha obligado el conflicto.
El conflicto aéreo, resuelto aparentemente en Iberia, ha rebrotado en las dos compañías españolas de charter. Los orígenes son distintos, pero, en cualquier caso, coincidentes en el tiempo y en sus efectos. La primera fase de huelga de Aviaco, y Spantax ha coincidido.. En Spantax se han convocado nuevos paros del 15 al 20 y en Aviaco la huelga, que a desconvocarse en caso de funcionar el acuerdo de arbitraje, está programada para el 191 y 20.
Numerosos pasajeros, con el. servicio contratado en estas compañías, han sido desviados por los operadores turísticos hacia compañías de la competencia extranjeras.
La crispación de los paros tiene su máximo exponente en la denuncia efectuada por el comité de empresa de Spantax, que acusa a dos pilotos de haber efectuado vuelos sin que se hayan realizado las inspecciones de los aparatos.
La acusación, respaldada por UGT y rechazada por la compañía, es muy grave, e, independientemente de que sea cierta, afecta de manera muy acusada a la credibilidad futura de la compañía, dado que, como comentaba uno de los responsables del sector aéreo, "lo único que tiene una compañía es la credibilidad sobre su seguridad; afirmar que se está volando sin revisiones puede provocar daños irreparables".
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