Discretos cambios en la sesión de apertura
Los mercados de valores han vivido una jornada mucho mas tranquila que las precedentes gracias a la menor presión ejercida por el papel y a algunas tomas de posiciones realizadas en los sectores industriales. Al tiempo, los tres grupos más potentes del mercado parecen haber iniciado una pequeña reacción técnica ante las bajas acumuladas, dando paso a un ambiente más relajado en el que resulta mucho más fácil tomar decisiones. La aparente tranquilidad que muestran las instituciones ha obligado a buscar en otros grupos la procedencia del papel y la inversión extranjera ha entrado a formar parte del conjunto de posibles causas de la tendencia a la baja, sobre todo por el número y el tipo de los títulos puestos a la venta.Los volúmenes de contratación, mientras tanto, han encontrado un buen nivel de referencia en tomo a los 6.500 millones de pesetas efectivas, lo que indica que la liquidez se mantiene alta, aunque insuficiente para promover una recuperación efectiva de las cotizaciones. El mercado a crédito también parece salir del bache en que -quedó inmerso en las últimas sesiones, pues las compras vuelven a distanciarse sustancialmente de las ventas y otra vez alcanzan el 10% del total contratado.
Pero la desconfianza, y el papel, impiden que se produzca una recuperación que tenga una duración superior a los tres o cuatro días. La presencia de algún dinero en los corros eléctricos apenas si ha alcanzado para que las bajas fuesen demasiado importantes, en unos casos, y producir pequeñas recuperaciones, en otros. Sevillana inició su ampliación de capital, cotizándose los derechos de suscripción á 13,50 pesetas, con lo que las acciones viejas han recuperado 1,7 enteros.
En el sector bancario también se una ampliación de capital, la del Banco Pastor, con los derechos de suscripción cotizados a 50 pesetas, cantidad que cedieron las acciones en circulación además de otros 14 enteros. El papel no termina de alejarse de este grupo, aunque ha descendido hasta quedar el saldo de los siete grandes por debajo de los 100.000 títulos a la venta. El volumen de títulos anunciados se mantiene cercano a los 300.000, cifra que indica, que el dinero todavía no está dispuesto a asumir riesgos. Los sectores industriales fueron los que registraron un ambiente más positivo, destacando los valores químicos y siderúrgicos, que consiguieron avances importantes en algunos casos. Dentro del primero de estos grupos, Unipapel abonó el dividendo correspondiente al ejercicio pasado por un importe de 82 pesetas netas, de las que las acciones recuperaron 2,4 enteros.
La sesión no mostró fuerza suficiente como para que pueda ser considerada el inicio de una recuperación, aunque el avance que registró el mercado catalán, de 2,69 puntos, basado en la mejoría de los valores industriales, -y lo cortos que fueron los resultados negativos de los otros tres mercados, han servido para calmar los ánimos y poner sobre aviso a los inversionistas. Las posiciones de dinero que se registraron al cierre deben confirmarse en sesiones sucesivas para que el papel deje de fluir, aunque hay quien opina que esto sería como poner el carro delante de los bueyes.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.