"Coalición Popular está más fuerte que nunca", responde Fraga a los pronósticos rupturistas del presidente del Gobierno

FERNANDO JÁUREGUI ENVIADO ESPECIAL Los tres dirigentes de Coalición Popular desmintieron ayer los pronósticos rupturistas sobre el futuro de la principal fuerza de la derecha española hechos por Felipe González, y aseguraron que no hay fisuras ni entre los tres partidos que la integran ni sobre el futuro poselectoral de su principal líder. Coalición Popular "goza de buena salud" y "está más fuerte que nunca", fue la respuesta del presidente de la coalición y de Alianza Popular, Manuel Fraga. "Es una conjetura huérfana de fundamento", dijo Óscar Alzaga, presidente de Partido Demócrata Popular (PDP). "Hemos firmado. impacto y tenemos una idea muy clara de lo que debe ser", fue la respuesta de José Antonio Segurado, tercer integrante de la coalición.

El vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, se sumó ayer a las predicciones de Felipe González sobre la ruptura de la CP tras las elecciones y dijo que la persistencia de la coalición "depende de los resultados electorales". Guerra, durante: la presentación del Plan de Energías Renovadas, del Ministerio de Industria, dijo ayer a un auditorio, formado mayoritariamente por empresarios, que "la derecha española debe organizarse sólidamente".Sobre Felipe González, Fraga dijo que, en lugar de dar consejos a la oposición, "mejor haría en explicar la gestión del Gobierno". "Que estas cosas [sobre la ruptura de la coalición] me las diga a mí a la cara, en un debate", agregó, refiriéndose al arranque de "mala fe" mostrado por el presidente del Gobierno al pedir que sean los grupos de oposición los que designen cuál de sus líderes debe enfrentarse con él en un debate televisivo.

Fuentes de AP señalaron ayer, no obstante, que las negociaciones al respecto entre el secretario de imagen del PSOE, Guillermo Galeote, y el coordinador electoral aliancista, Carlos Robles Piquer iban "por buen camino", y que el debate se celebraría, probable mente, el día 20, jornada final de la campaña.

Pese a la rapidez y al modo tajante con que Fraga despacha la cuestión del futuro de Coalición Popular y temas relacionados con éste, como las otras alternativas al socialismo (evita siempre, en lo posible, referirse públicamente de manera expresa a Miquel Roca al reformismo) o su porvenir personal, estos puntos están convirtiéndose en una constante en la conferencias de prensa que el dirigente conservador celebra durante su campaña.

La venda y la herida

Sobre, las intenciones de sus coligados se limitó a señalar que "son señores que siempre han cumplido sus pactos". Y cuando se le interrogó sobre posibles conflictos futuros antelas elecciones autonómicas de mayo, de 1987, en las que tanto AP como el PDP pretenden imponer al otro sus propios candidatos a las respectivas presidencias de las juntas autonómicas de las dos Castillas, se negó a entrar en el asunto, repitiendo que no se debe "poner la venda antes de que haya herida".

También ayer Fraga rompió su habitual norma de no atacar a Roca o al Partido Reformista Democrático, al menos frontalmente, cuando, tras no poca insistencia de los informadores, acusó al candidato reformista de "meterse en la política nacional para hacer una prolongación de la política nacionalista, lo que no me parece bien". Fraga, que admite que antes sí se enfadaba ante preguntas molestas, pero ahora "van ustedes a tener que hacer muchos esfuerzos para que me enfade", dijo, no puede, no obstante, ocultar su irritación cuando algún periodista le insiste en la posibilidad de que los poderes económicos hayan apostado por la figura de Roca como su sustituto al frente de la alternativa al socialismo: "Mi respuesta ante eso va a ser corta: no".

Por su parte, Óscar Alzaga, presidente del Partido Demócrata Popular (PDP), afirmó ayer en Barcelona, sobre las supuestas desuniones en el seno de Coalición Popular, que Felipe González "sigue su tradicional costumbre de predicar la desunión entre las fuerzas de la oposición".

"Afirmo solemnemente que desde el PDP no percibimos ninguna desunión en Coalición Popular", dijo Alzaga. "Es una conjetura huérfana de fundamento", añadió durante una conferencia de prensa, informa José Antich. Posteriorente, en un acto electoral celebrado en Castelldefels, al que asistieron unas 200 personas, Alzaga abogó por la creación, tras las elecciones, de un Gobierno de coalición de todos los partidos de la oposición. "Esa fórmula de Gobierno es más europea y fomenta el diálogo de los poderosos con los ciudadanos", dijo el líder del PDP. "En Europa hay una vieja idea: todo poder corrompe, pero el poder absoluto corrompe del todo. El que tiene el poder ha de saber que no es el dueño del mismo", añadió Alzaga.

En Valencia, el presidente del Partido Liberal, José Antonio Segurado, no quiso ayer calificar las manifestaciones de Felipe González, aunque criticó la actitud del presidente. "Comprendo que tiene que hablar de algo, pero no voy a entrar en ese juego y, desde luego, yo no voy a hablar del Partido Socialista", dijo el líder liberal.

"Hemos firmado un pacto y, tenemos una idea muy clara de lo que debe ser", manifestó Segurado respecto a la Coalición Popular y su continuidad tras las elecciones y añadió: "En ningún momento se nos ha ocurrido hablar de la sustitución de ninguno de los líderes de los partidos coligados".