El régimen polaco acusa a Bujak de estar en contacto con el espionaje occidental

El jefe de los servicios de seguridad polacos, general Henrik Dankowski, ha acusado a Zbigniew Bujak, dirigente en la clandestinidad del sindicato Solidaridad, detenido el sábado, de mantener relaciones con los servicios de espionaje occidentales, según informaba ayer el diario oficial del partido comunista, Trybuna Ludu.El rotativo señalaba que el general Dankowski anunció el sábado en una conferencia del partido en Varsovia que Bujak había sido detenido a primeras horas de ese mismo día tras haber sido perseguido desde diciembre de 1981. "Su actividad estaba dirigida e inspirada por los servicios de espionaje occidentales", dijo.

La policía también detuvo a los más próximos colaboradores de Bujak en la clandestinidad y aprehendió importantes documentos, moderno equipo de comunitaciones y dinero occidental, según el general, quien acusó a Bujak de organizar disturbios callejeros y una red nacional de imprentas que produjo "sucesos trágicos en Polonia".

Bujak tendrá que enfrentarse a la acusación de actividades contrarias al régimen -que puede ser castigada hasta con 10 años de cárcel-, según pudo saber su esposa, Waclawa, en la oficina del fiscal del Estado. Waclawa no pudo visitar a su marido.

La operación de la captura del dirigente de la Comisión Coordinadora Provisional de Solidaridad fue supervisada por el ministro del Interior, general Czeslaw Kiszczak, y "deberá paralizar las actividades de estructuras clandestinas en Varsovia y en todo el país", de acuerdo con el jefe de los servicios de seguridad.

Fuentes de la oposición al régimen del general Wojciech Jaruzelski señalan que Bujak fue detenido en un piso de la capital y, en otro, Konrad Bielinski y Ewa Kulik, otros dos activistas sindicales.

Miembros de Solidaridad y diplomáticos occidentales consideran que la detención de Bujak es el más serio golpe contra el sindicato desde que la ley marcial impuesta en Polonia en diciembre de 1981 (levantada en julio de 1983) aplastó el movimiento sindical. Los mismos medios hacen notar la proximidad temporal de esta detención con el congreso del partido, que comienza el 29 de junio, el primero desde la implantación de la ley marcial.