El tipo de interés de los créditos preferenciales se coloca en el 15,60% para el conjunto de la banca

Los tipos de interés que las instituciones financieras aplican a sus operaciones de descuento de papel comercial y de préstamos y créditos se mantienen a un nivel elevado, mostrando una estabilidad que no se corresponde con las expectativas a la baja de la tasa de inflación de la economía española ni con las tendencias en el resto de los mercados financieros.

Los préstamos preferenciales, los que se conceden a los mejores clientes, a tres años tienen un tipo de interés del 15,59% en el conjunto de la banca y del 14,07%, en las cajas de -ahorro. De confirmarse la tendencia de reducción de los precios, estos tipos de interés parecen inmantenibles a corto plazo.En los últimos meses, y tras el esfuerzo llevado a cabo durante 1985 para rebajar los tipos de interés de las operaciones de activo y de pasivo, las instituciones financieras parecen haber decidido mantener los niveles de precios sin introducir modificaciones en ellos. La pérdida del control monetario en los primeros meses del año y la consiguiente elevación del precio del dinero en las subastas de préstamos de regulación del Banco de España provocó un cierto tirón al alza en el precio del dinero en el mercado interbancario.

No obstante, en medios financieros se considera que la actual situación no se puede mantener a corto plazo, en especial si se confirma como definitivo el avance provisional del índice de precios al consumo correspondiente al mes de abril, que marca una reeducción de algo más de medio punto sobre el mismo mes del año anterior. Con este dato en la mano, la tasa de inflación de los tres últimos meses, elevada a anual, está en el 5%, lo que significa que, descontado el efecto del IVA, los precios en España muestran una tendencia a la baja muy similar a la que experimentan en el resto de los países industrializados.

Ello debería favorecer una reducción de los tipos de interés nominales tanto en las operaciones de activo como en las de pasivo para que se mantuviera, como parece ser el objetivo, el mismo nivel de tipos de interés reales. Algunos bancos, al anunciar sus cuentas de resultados correspondientes al primer trimestre del año en curso, han señalado que, aunque algo más lenta, ha continuado la tendencia a la baja en la retribución de los recursos de terceros y, en menor medida, los ingresos por sus operaciones de descuento comercial o de créditos y préstamos. Las dudas sobre el impacto inflacionista del IVA podrían haber aconsejado una cierta prudencia durante los primeros meses del año, pero a partir de ahora no parece que haya ninguna causa que explique que se mantenga la misma situación.

Costes de transformación

La situación actual de los ingresos y costes financieros de las instituciones financieras españolas, descontado el efecto negativo que tienen los elevados coeficientes a que están sometidos bancos y cajas de ahorro, se explica en parte por los elevados costes de transformación en que incurren estas sociedades, aunque ello sólo justifica la necesidad de efectuar los ajustes necesarios en. el menor plazo de tiempo posible porque, una vez que se produzca la plena integración en la Comunidad Europea, los mayores costes -generales y de personal- de las instituciones españolas no podrán justificarse y, mantenerse mediante acciones legales.La banca y las cajas de ahorro tienen, en un futuro próximo, un reto importante. Por una parte, deben reducir los tipos de interés reales que aplican a las operaciones de créditos y préstarnos, y al tiempo deberán hacer frente a las mayores exigencias de los depositantes de conseguir rentabilidades más elevadas por la colocación de su pasivo, como ocurre en el resto de las economías de los países industrializados.

El gobernador del Banco de España, en su reciente competecencia ante la comisión de economía del Congreso de los Diputados y en su conferencia en el Club Siglo XXI, abordó la necesidad de que se liberalizara la mayor parte de las operaciones de pasivo, en concreto los depósitos a menos de seis meses de plazo, lo que significará en definitiva una mayor retribución de estos recursos.