La feria de Sevilla, amenazada por la huelga indefinida de toreros
La feria de Sevilla, que empieza el próximo viernes, está seriamente amenazada por la huelga de toreros, convocada para mañana con carácter indefinido, pues las posiciones de estos profesionales y de la Administración son irreconciliables en lo que se refiere a la base reguladora de la pensión de jubilación. De no haber acuerdo de última hora, tampoco se celebrará la corrida de Baeza de mañana, que iba a televisarse.
Luis García de Blas, secretario general para la Seguridad Social, considera que la huelga de toreros es incomprensible, pues sus representantes profesionales saben que la Administración no puede satisfacer la reivindicación sobre la base reguladora de la pensión de jubilación, en que la justifican.Suprimido el régimen especial de los toreros, entre otros, la Secretaría General elabora el proyecto de decreto que ha de integrarlos en autónomos o en el régimen general. Para ello, representantes de ambas partes celebraron reuniones, y como no había acuerdo, en febrero los toreros acordaron huelga. Posteriormente, a primeros de marzo, la Administración ofreció integrarlos en el régimen general, y decidieron desconvocar temporalmente la huelga, para que pudieran celebrarse las ferias de Castellón y Valencia, y reanudar las negociaciones.
La propuesta de la Administración de integrar a los toreros en autónomos, no fue aceptada por los profesionales taurinos, pese a las mejoras ofrecidas, pues entendían que suprimía sus derechos de trabajadores por cuenta ajena. Las condiciones de integración en el régimen general son, en líneas generales: sistema especial de afiliación, altas y bajas; cotización por salarios reales; mantenimiento de la edad de jubilación a los 55 años; validez de todas las cotizaciones efectuadas en los sistemas anteriores; adecuación del accidente de trabajo a la actividad taurina; protección de desempleo.
Hubo dos peticiones de los toreros, acerca de la jubilación, que no fueron aceptadas: máximo de 30 años para alcanzar el 100% de la base reguladora de la pensión, y que esta no se calcule teniendo en cuenta los últimos ocho años anteriores a la jubilación.
Los representantes de la Seguridad Social afirman que esta reivindicación, imposible de atender pues va contra la ley, ya no fue planteada en las últimas reuniones. De ahí la extrañeza de que haya servido de justificación para una huelga, que fue acordada en la asamblea del pasado día 2.
La asociación de matadores ha comunicado que la oferta de la Administración es inaceptable, y si en el transcurso del día de hoy no se eliminan del proyecto "los condicionamientos lesivos para los toreros", la huelga entrará en vigor mañana.
Paco Corpas, vicepresidente de la asociación de toreros, afirma que las negociaciones han sido muy cortas para la complejidad de los temas y, según su testimonio, el pasado día 1 -víspera de la asamblea-, la representación de los toreros fue recibida a última hora de la noche por el Director General de Régimen Jurídico, José Antonio Panizo. En esta reunión reiteraron que su reivindicación sobre la base reguladora de la pensión de jubilación era inamovible, y Panizo les respondió que ese punto no era negociable pues vulnera la ley.
Representantes de los toreros -cuyo presidente es el matador José Antonio Campuzano-, opinan que la oferta de la Administración supondría un buen régimen de seguridad social para ellos, si no fuera por esas dos situaciones relativas a la jubilación, que no pueden admitir, pues entre los 47 y los 55 años de edad la mayor parte de los toreros están retirados, o tienen una vida profesional muy poco activa y mal remunerada.
Corpas indica que puede haber dos soluciones para desconvocar la huelga: una, que la Administración acepte sus exigencias; otra, que se abra un nuevo período de negociación y, hasta que se alcance un acuerdo, continúe en vigor el régimen especial. "Esperamos", dice, "hasta las 12 de la noche de hoy. Si la Secretaría General de la Seguridad Social acepta alguna de estas situaciones, la huelga será desconvocada".
García de Blas manifestó que es aficionado a los toros, conoce los problemas de los toreros, consideraría penoso, y negativo para estos profesionales y la propia fiesta, que se suspendiera la feria de Sevilla, y siempre ha estado dispuesto -hoy también- a negociar todo lo negociable, con el fin de llegar a un acuerdo.
"Pero", añadió, "vulnerar una ley no es negociable, y si se pretende que haga eso la Administración, no hay solución".
