Dos presos muertos, uno de ellos ahorcado, en la cárcel de Ocaña
Dos presos fallecieron el pasado fin de semana en la cárcel de Ocaña (Toledo) uno de ellos por una hemorragia gástrica y otro ahorcado. Rafael López Díaz fue encontrado muerto en su celda del departamento celular, donde se encontraba desde el día 21, el pasado sábado por la noche.
La muerte de Rafael López Díaz se debió según la autopsia a una hemorragia masiva gástrica provocada por un trozo de palillo de dos centímetros clavado en el antro pilórico. Rafael López Díaz se negaba a comer desde el día 26; únicamente tomaba pan y agua y la noche anterior a su muerte tuvo molestias digestivas.
José Escolano Peiró, cuya condena de un año finalizaba en octubre, fue hallado el pasado viernes en el interior de su celda en el departamento celular, ahorcado con la colcha de la cama. Cuando fue encontrado su cuerpo todavía estaba caliente por lo que le fueron aplicados masajes y practicada la respiración boca a boca, sin resultado positivo.
