La rotura de la presa de Tous fue inevitable, según uno de los técnicos procesados
Nuevos estudios de la Universidad Politécnica de Valencia estiman que el caudal de la riada que causó la rotura de la presa de Tous el 20 de octubre de 1982 casi alcanzó los 9.000 metros cúbicos por segundo. La capacidad de desagüe de las compuertas del embalse, que no pudieron ser abiertas, era de 7.000 metros cúbicos por segundo. Los datos citados fueron aportados por el ingeniero del MOPU Román Guerrero, el cargo más alto procesado en el caso Tous, y que esta misma semana prestó declaración ante el juez de Xátiva, instructor del sumario. Según Guerrero, de los datos se desprende que el desmoronamiento del muro de contención de la presa, que causó una veintena de muertos, era inevitable.El ingeniero mencionado era, en aquellas fechas, Jefe del Servicio de Grandes Presas del ministerio y máximo responsable de la de Tous. Junto con Guerrero, están procesados Florentino Santos, director de la presa en octubre de 1982, Salvador Madrigal, autor del proyecto, y Jesús González Marín, encargado a pie de obra.
Según Román Guerrero, que sigue ocupando un alto cargo en el MOPU, la cantidad de agua que albergaba Tous aquel día apenas llegaba a los 50 hectómetros cúbicos, "cantidad insignificante si se compara con los 1.000 hectómetros cúbicos que se precipitaron sobre la cuenca de recepción del pantano, antes de la rotura. Después cayeron otros 1.500."
Como prueba de que fue "el insólito, imprevisible e inevitable fenómeno meteorológico el que motivó la inundación de la comarca valenciana de la Ribera" y de la irrelevancia del hecho de que las compuertas estuvieran cerradas, los ingenieros encausados afirman que tampoco pudieron ser abiertas las de las presas de Millares y Cortes de Pallás, situadas aguas arriba de Tous. "Gracias a que no se pudo abrir el aliviadero,", asegura Guerrero, "el pantano retuvo la primera avenida del río Escalona, que llevaba al amanecer, del día 20 unos 4.000 metros cúbicos por segundo, cuando horas antes su caudal era nulo. El pantano laminó la riada al principio. Después se limitó a verter agua al inmenso lago en que se había convertido la comarca de la Ribera".
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