El 'sí' ganó abultadamente en Palomares

El voto afirmativo a la permanencia en la OTAN triunfó abultadamente en Palomares, con 332 votos de los 441 emitidos, lo que significa el 75,28% de los sufragios, frente a los 94 votos negativos, equivalente al 21,31%. Las papeletas depositadas suponen el 66,2% de los 667 electores censados, sobre los cuales planea ahora más que nunca el accidente nuclear ocurrido una mañana de invierno -17de enero de 1966- en que no lucía el sol. A las nueve de la mañana de ayer, una vecina de Palomares, María Alarcón, presidía la única urna instalada en el colegio público, situado a 60 metros del lugar donde aquella mañana de hace 20 años cayó el tren de aterrizaje de los dos aviones que arrojaron bombas termonucleares y siete muertos.El sol lucía ayer en esta pedanía del término municipal de Cuevas del Almanzora, en el levante almeriense, quizás uno de los pocos núcleos de población donde los partidos políticos han tenido la sensibilidad de no acudir, al menos haciendo mítines. Los vecinos consultados, cuando hablan de los problemas de Palomares, se refieren a la falta de agua y a la actitud de los exportadores, que no quieren oír de la etiqueta Palomares en las cajas de tomates que salen de esta zona.

Antonia Flores, de 26 años, es la alcaldesa pedánea. Emitió su voto a las 9.16 horas, mientras que Pedro Domingo Sánchez, de 65 años, que pertenece a una familia conservadora, ayer votó no. Sánchez era el profesor de EGB que explicaba a los alumnos de hace ahora 20 años la lección, en una de las enciclopedias al uso. En cambio, Flores siguió las directrices de su partido, el PSOE, y votó sí, igual que Andrés Fernández, alcalde de Cuevas del Almanzora, municipio cuya corporación aprobó la desnuclearización de la zona. Fernández afirmó que los síes se impondrían en su término municipal. "Pero en Palomares", dijo el alcalde, "no me atrevo a dar un pronóstico". Antonia Flores, a las 14.30 horas de ayer, cuando almorzaba, se expresé, en igual sentido, aunque señaló que hasta el cierre de las urnas "no tengo ni idea de lo que pueda ocurrir". Los padres de la alcaldesa, a esa hora, no habían votado. Lo harían a última hora, según explicó la madre, Genoveva García, de 49 años de edad. Para este matrimonio el día transcurrió con normalidad. "Mi marido ha ido como todos los días a cuidar de los animales y de la alfalfa", señaló Genoveva.

La foto de un beso

El PSOE, por medio de sus dirigentes provinciales, ha mostrado una reiterada sensibilidad preocupada por lo que ocurra no sólo en Palomares, sino también en los pueblos limítrofes.A la alcaldesa la llevaron a la capital, que dista 100 kilómetros de Palomares, para que besara, con foto distribuida por el propio partido, al secretario de Organización, Txiki Benegas. Posteriormente, Antonia Flores se ha dejado ver por Almería cuando José Barrionuevo cerró la campaña del referéndum el pasado lunes ante sus paisanos.