Carriega, molesto por su conflicto con Gabino

Luis Cid, Carriega, entrenador del Betis, manifestó ayer su disgusto por la situación creada por su enfrentamiento con Gabino, el jugador favorito de la afición verdiblanca desde la marcha de Gordillo. En los dos últimos partidos en el Villamarín, Carriega ha sido atacado por la afición a causa de Gabino. La reacción del público le impidió sustituirle hace dos semanas. El pasado domingo, tras dejarle en el banquillo, se vio obligado a alinearle mediada la segunda parte.El técnico hético atraviesa un momento delicado cuando aún le restan cuatro meses para la resolución de su contrato. La irregular marcha del equipo, descartada ya la posibilidad de jugar la próxima Copa de la UEFA, ha motivado que las seis últimas jornadas de la Liga sean de mero trámite.

Pero al puesto del Betis en la tabla clasificatoria se une el conflicto suscitado entre el entrenador y el joven jugador Gabino, que regresó del Logroñés con vitola de reactivo tras la pérdida de las anteriores figuras, Esnaola, Gordillo y Cardeñosa. Sus enfrentamientos son una réplica en Sevilla de la polémica suscitada en el Athlétic de Bilbao entre Javier Clemente y Sarabia.

Precisamente, una comida del secretario técnico de Betis, el otrora jugador Julio Cardeñosa, con el ex entrenador bilbaíno Clemente provocó todo tipo de comentarios acerca de la continuidad de Carriega en el equipo verdiblanco y afectaron de tal modo al preparador que fue necesaria una larga conversación con el presidente del club, Gerardo Martínez Retamero, para suavizar la tensión. Ésta venía agravada por cierto descontento entre varios componentes de la plantilla ante los criterios del técnico en el Planteamiento de los partidos.

El favorito

Gabino tiene trazas de ser el típico jugador del Betis que enamora a la afición con sus quiebros y caracoleos. Se le perdonan sus errores a cambio de su arte, pero también es inexperto y temperamental. El estallido del conflicto se produjo a primeros de año, en un entrenamiento, cuando Carriega ordenó, a Gabino que corriese más y éste le contestó de forma desairada. Aquello le valió al jugador una multa de 50.000 pesetas y una llamada de atención de la directiva.En el encuentro Betis-Zaragoza, hace dos semanas, Carriega pretendió sustituir a Gabino, mediado el segundo tiempo, pero la reacción de los aficionados a favor del jugador obligó al técnico a reconsiderar el cambio y optó por reemplazar a Romo en vez de a Gabino. Después del partido, Carriega dijo: "Es de listos rectificar. El público, a veces, también tiene la razón".

Por su parte, Gabino manifestó que se puso nervioso al ver la cartulina con su número, pero que no quería "tener más problemas", y expresó su intención de no hacer más declaraciones.

El público se volvió de nuevo contra el entrenador el pasado domingo, cuando éste, que no quiere hablar del asunto, dejó a Gabino en el banquillo. Carriega comentó que ofreció al jugador alinearle en la zona que suele ocupar Parra, pegado a la banda derecha, en lugar de en su posición habitual, en la media punta. "Gabino", asegura el entrenador, "estaba bajo de ánimo y prefería no jugar en esa zona". Gabino jugó en la segunda parte, tras ser su presencia insistentemente solicitada por la afición, que sigue siendo el detonante de esta polémica. Carriega comentó ayer: "El club me llamó el año pasado para echar una mano. Mi contrato termina en junio y trabajar es mi único problema".