El presidente de la RFA sugiere que la salida de la OTAN afectaría a las relaciones con España

Las autoridades de la RFA dieron ayer un paso cualitativo en su postura de insistencia para que España permanezca en la Alianza Atlántica al señalar ante el Rey el presidente federal, Richard von Weizsäcker, la importancia "de la aportación de los españoles a la alianza defensiva para la democracia en Europa y para los vínculos con la República Federal de Alemania". Los Reyes se despidieron ayer de Bonn y comenzaron su visita oficial al Estado de Renania-Westfalia. El presidente de dicho Estado, Johannes Rau, candidato socialdemócrata a la cancillería federal alemana, afectado por una fuerte gripe y que durante los últimos días había suspendido todas las visitas, se levantó ayer para recibir a don Juan Carlos y doña Sofía.

Rau conversó con el Rey por espacio de tres cuartos de hora en la cancillería del Estado; al cabo de ese tiempo, don Juan Carlos dijo a Rau: "Vuélvase usted a la cama". El gesto de deferencia hacia los Reyes no pudo evitar que Rau dejase de asistir a la comida oficial que le fue ofrecida por el ministro presidente suplente, Dieter Posser.Los Reyes fueron despedidos por la mañana con honores militares en Bonn, en un acto sin publicidad y del que las autoridades españolas no facilitaron ningún tipo de información. A media mañana, un portavoz de la presidencia del Gobierno federal comunicó a la agencia oficial española Efe y a la alemana DPA parte del contenido de la despedida, centrándolo exclusivamente en que Von Weizsäcker había mostrado ante el Rey su esperanza de que España decida en el referéndum del 12 de marzo "permanecer en la OTAN". El portavoz añadió la referencia citada al valor que el presidente federal confiere a la permanencia de nuestro país para la defensa de Europa y para las relaciones bilaterales. La llamada del portavoz de la presidencia a la agencia oficial española fue juzgada en medios periodísticos de Bonn como una actitud absolutamente inhabitual.

Tras la despedida en Bonn, los Reyes viajaron hasta Colonia, donde fueron recibidos en el ayuntamiento y firmaron en el libro de honor de la ciudad. De allí se trasladaron hasta la catedral, donde fueron recibidos por el cardenal y presiente de la Conferencia Episcopal Alemana, Joseph Höffner. El frío era tan intenso, que las pilas del agua bendita aparecían heladas. A pesar de ello, varios miles de personas se concentraron ante la catedral para saludar a los Reyes. La catedral había sido. totalmente desalojada de público media hora antes, en una muestra más del extremado rigor adoptado por las autoridades alemanas respecto de las medidas de seguridad que rodean el viaje.

Tras la visita a la catedral, los Reyes se trasladaron a Düsseldorf, donde fueron recibidos por el presidente Rau. Tras el encuentro antes mencionado se produjo el almuerzo oficial en el palacio barroco de Benrath. El Estado de Renania-Westfalia es el más poblado de los que integran Alemania Occidental, el más rico junto con Baviera y en el que trabaja el mayor número de españoles. Ello explica que don Juan Carlos, en su contestación al discurso del presidente suplente, Posser (que se limitó a referencias históricas y a subrayar la cordialidad de las relaciones entre los dos países), volviese a insistir sobre la importancia de la aportación de los trabajadores españoles al desarrollo económico de la región y al estrechamiento de lazos culturales.

Hoy, los Reyes se trasladan a Berlín y posteriormente a Múnich, donde mañana concluirán su visita oficial.