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Liberados dos barcos españoles que fueron apresados en Líbano

Los barcos españoles Carbosco y Carriñigó, que llevaban una carga de automóviles usados y fueron apresados la semana pasada en Líbano por una patrullera israelí y conducidos hasta Israel, quedaron libres ayer, según confirmó Rafael Pastor Ridruejo, director general de Asuntos Consulares del Ministerio de Asuntos Exteriores, organismo desde donde se han realizado las gestiones. El apresamiento se produjo cerca de Sidón, cuando una patrullera de Israel retuvo a los dos barcos al sospechar que junto con los automóviles transportaran armas para alguna facción libanesa en guerra.

Las tripulaciones del Carboseo y del Caniñigó suman aproximadamente 30 hombres. Cada barco tiene capacidad para albergar a unos 800 automóviles. Estos buques están asegurados por el Banco Vitalicio con un reaseguro por zona peligrosa. Los dos barcos, según su armador, "han realizado infinidad de veces el recorrido hasta el Líbano y hacia algunos países árabes". Son de la clase car-carrier y están especializados en el transporte de coches. La empresa propietaria, la Naviera Interrol, cuyos accionistas son el español Armando Ligeri y el árabe Labiad, suspendió pagos hace unos ocho meses.

.A partir de ese momento y por intervención judicial los barcos pasaron a depender de la Sociedad Gestora de Buques (SGB), dependiente del Banco de Crédito Industrial.

Los barcos apresados fueron construidos en Gijón hace cuatro años y tienen 101 metros de eslora y 16,50 de manga.

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