Tomás y Valiente cuenta con los votos precisos y para ser presidente del Tribunal Constitucional

Los seis nuevos magistrados del Tribunal Constitucional juraron o prometieron sus cargos ante el Rey, y tomaron posesión de los mismos en sendos actos sucesivos celebrados ayer, respectivamente, en el palacio de la Zarzuela y en la sede del alto tribunal. El presidente saliente, Manuel García-Pelayo, expresó su confianza en que los nuevos magistrados "mantendrán", dijo, "la autoridad del tribunal". Para la elección de presidente, prevista para mañana, salvo sorpresas, sólo Francisco Tomás y Valiente cuenta con los siete votos necesarios para ser elegido en la primera votación.

Juraron, su cargo Miguel Rodríguez-Piñero y Luis María -López-Guerra -los dos magistrados designados por el Gobierno- y Jesús Leguina, elegido por el Congreso, y lo prometieron los otros tres:Eugenio Díaz Eimil y Carlos de la Vega, designados por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), y Fernando, García-Mán, elegido por el Senado.Además de don Juan Carlos y doña Sofia, asistieron al acto el presidente saliente del alto tribunal y los presidentes del Gobierno, Felipe González; Tribupal Supremo y CGPJ, Antonio Hernández Gil, y Senado, José Federico de Carvajal, así como el ministro de Justicia, Fernando Ledesma.

En el acto de toma de posesión de los seis, nuevos miem bros del Tribunal Constitucional, además de Hernández Gil, De Carvajal y Ledesma, estuvieron presentes el fiscal general del Estado, Luis Antonio Burón; el presidente del Consejo General de la Abogacía, Antonio Pedrol, y otros numerosos juristas y familiares de los magistrados salientes y entrantes.

Díez-Picazo no se presenta

Terminado el acto oficial, los magistrados salientes y entrantes y los que permanecen departieron, en el vestíbulo de la sede del tribunal, con los invitados al acto.

La principal curiosidad se centraba en la próxima elección de nuevo presidente del Tribunal Constitucional. Nadie discute que el nuevo presidente será uno de los magistrados veteranos.

Sobre esta base, Francisco Tomás, y Valiente es el único magistrado que cuenta, en principio, con el mínimo de siete votos necesario para ser elegido en la primera votación, sobre todo si se mantiene la actitud de Luis Díez-Picazo de no optar a la presidencia, según fuentes próximas a este magistrado. En este caso, Díez-Picazo podría ser elegido vicepresidente.

En las últimas semanas se había avanzado la hipótesis de que ante un tribunal que sintoniza más que el anterior con la mayo ría socialista, podría resultar conveniente el contrapeso de un presidente, como Díez-Picazo, de tendencia más moderada que Tomás y Valiente y en su día propuesto por UCD.

En el acto, que presidirá Ángel Latorre, como magistrado de mayor edad, de no lograrse la mayoría absoluta en la primera votación, se procederá a una segunda, en la que resultará elegido quien obtuviese mayor número de votos

En caso de que se produzca empate, se efectuará una última votación y si el empate se repite, será elegido el de mayor antiguedad en el cargo y, en caso de igualdad, el de mayor edad. En medios jurídicos y políticos progresistas se considera muy conveniente un alto consenso en la elección del nuevo presidente, primera decisión del tribunal renovado en la mitad de sus miembros.