Los presidentes de México y Venezuela coordinan su política petrolera

Los presidentes de México y Venezuela, cuyos países son los dos principales productores de crudo de América Latina, iniciaron ayer en la isla mexicana de Cancún negociaciones orientadas a coordinar su política petrolera y amortiguar así los efectos en sus economías de la reciente caída en los precios del crudo. Por otro lado, el dólar repuntó algunas décimas en su cotización en los mercados mundiales (en Madrid, cerró a 150,69 pesetas) ante las las expectativas de que los tipos de interés en Estados Unidos se mantendrán estables, pese a la reducción de los japoneses.Ayer cedió algo la tensión en los mercados mundiales del petróleo. Las iniciativas de algunas naciones productoras para propiciar un recorte en la producción, en espera de que se establezca un nuevo acuerdo para fijar una cuota de ventas dentro de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), y el compás de espera abierto con la reunión de expertos de esta organización que prosigue en Viena, han tranquilizado a un mercado que sigue bajo fuertes dosis de incertidumbre.

La reunión de Cancún entre los presidentes de Venezuela, Jaime Lunsinchi, y el de México, Miguel de la Madrid, tiene un objetivo psicológico claro, a juicio de los expertos del mercado. Se trata de convencer a los países consumidores de que los productores harán todo lo que esté en su manos para evitar un hundimiento indeseado en los precios reales de venta del crudo. Venezuela y México obtienen del petróleo el 90% y 75%, respectivamente, de sus ingresos.

Acuerdo de Venezuela

Dos países endeudados por encima de sus posibilidades de pago, cualquier disminución en sus ingresos les dejaría en una situación mucho más grave de la que ya tenían. Ayer, sin embargo, se informó en Caracas que Venezuela ha llegado a un acuerdo con sus acreedores extranjeros para la renegociación de un paquete de deuda externa que alcanza los 21.200 millones de dólares. El acuerdo se firmará en Nueva York a partir del próximo 24 de febrero, según Reuter.El acuerdo culmina tres largos y tensos años de negociaciones y reestructura la deuda exterior venezolana por un período de doce años y medio. Segun fuentes bancarias, Venezuela aceleró la culminación de las negociaciones a raíz del fuerte declive que experimenta el mercado de crudo.

Por otro lado, el ministro indonesio del Petróleo, doctor Subroto, declaró ayer que la OPEP debería establecer, en su próxima conferencia extraordinaria, una nueva cuota máxima de producción para sus trece miembros. Para Subroto, la cuota debería ser más elevada y pasar de 16 a 18 millones diarios de barriles. El indonesio no explicó, sin embargo, cómo podría alcanzarse este objetivo en un momento de tanta debilidad como el que sufre el mercado mundial.

Mientras tanto, los precios del crudo siguieron ayer mostrando un comportamiento errático. La falta de operaciones en los mercados libres fue la nota dominante y las que se realizaban, en especial en el mercado del tipo brent del mar del Norte, se cursaban con una firmeza inesperada, en torno a los 19 dólares. Más débiles se mostraban los precios a futuro, con cambios entre 17,80 y 18,50 dólares, según el mes del año.

La evolución del dólar al alza, una vez que se confirmara la baja del tipo de descuento en Japón, es atribuida por los expertos a la impresión existente en Estados Unidos de que el Federal Reserve Board (FED) no tiene intenciones de favorecer una baja de sus propios tipos. La razón es clara: un movimiento en esta dirección agravaría la tendencia a la baja que el dólar ha mostrado en la última semana. No obstante, otros expertos apuntan que si el FED no propicia esta iniciativa se va a provocar un auténtico colapso en los esfuerzos para aliviar los problemas de las naciones endeudadas, que esperan una baja en los tipos para reducir la carga de intereses en sus ingentes deudas.

Por otro lado, ayer se confirmaron algunas noticias poco optimistas sobre la evolución de la economía norteamericana. Al margen de la reducción de la productividad en la industria en el último año, en un 1,3%, se ha sumado el agravamiento del déficit comercial en más de un 20%, hasta totalizar 148.500 millones de dólares, cifra récord en la historia.