Hijas de la medianoche
400.000 mujeres ejercen la prostitución en España en condiciones generalmente tercermundistas
A pesar de la falta de estadísticas, se calcula que más de 400.000 mujeres ejercen la prostitución de calle en España. A ello hay que sumar los otros tipos de comercio sexual femenino, así como la prostitución masculina. Éstos son algunos de los datos manejados en los debates, clausurados ayer, que sobre la situación legal de la prostitución, la salud pública y la sociología del comercio sexual se han desarrollado durante tres días en la facultad de Ciencias Económicas de Valencia.
Las jornadas, pese al interés de sus contenidos justificado por una nutrida asistencia, no contaron, sin embargo, con excesiva presencia por parte del sector social sobre el que se discutía.Para María José Martí, del Departamento de la Mujer de la Generalitat valenciana -que ha organizado los debates-, "la prostitución es un tema poco tratado, al que se añade la dificultad de localizar gente que lo estudie desde una perspectiva seria". "Por otra parte-, añade, "creo que el movimiento feminista no lo ha analizado suficientemente. No hay una opinión clara".
Los estudiantes de la propia facultad que sirvió de marco a los debates fueron el público más numeroso, que se entremezcló con médicos, abogados, sociólogos, feministas, algún político y hasta medía docena de religiosas que se contabilizaron entre los casi quinientos asistentes, por término medio, a las exposiciones y coloquios.
En contraste, escasa presencia de prostitutas durante las sesiones, que, sin embargo, contaroncon significativas intervenciones, tanto desde la mesa como desde el público asistente. Para María José Martí, "las prostitutas padecen una situación tal de marginación, que les resulta hasta difícil aparecer públicamente en este tipo de debates".
Especialmente ilustrativas fueron las ponencias que pusieron de relieve la situación legal que afecta a la prostitución en España. El fiscal de la Audiencia Provincial de Valencia y miembro de la Unión Progresista de Fiscales, Manuel Dolz, que analizó la evolución jurídica habida en las últimas décadas con relación a este sector socíal, afirmó que los códigos morales tienen efectos muy superiores al propio derecho, resultante de los presupuestos ideológicos del legislador".
La doble moral imperante en algunos sectores de la sociedad española fue uno de los aspectos abordados por este fiscal, para el cual "la legislación no ampara la libertad sexual, sino un concepto de moralidad pública que oculta exteriormente el hecho, pero lo justifica interiormente". Para la concu rrencia constituyeron motivos de sorpresa las argumentaciones legales que, desde los decretos del franquismo hasta las circulares del Tribunal Supremo donde se recogían las materias relativas a la moralidad pública, han adornado la jurisprudencia relativa a la prostitución.
En estos presupuestos se sitúan desde la derogación del decreto mediante el cual el propio régimen franquista había permitido el comercio sexual, justificado en base "al mal que causa enfermedad debido a la relajación moral que se produjo durante la guerra en la zona roja", hasta las últimas normas jurídicas expuestas por la letrada María Cruz Castejón, según las cuales "se sanciona con mayor rigor a los rufianes y proxenetas que explotan a personas mayores de 23 años que las penas contempladas si se trata de edades inferiores, donde habría que incluir a la prostitución infantil".
Enfermedades sexuales
Otros aspectos analizados en las jornadas se basan en los estudios realizados por los centros de planificación familiar y enfermedades de transmisión sexual (ETS), a partir de las consultas de las propias prostitutas. El realizado por Milagros Julve y Eli Elizalde, del hospital General de Valencia, a partir de una encuesta realizada entre 50 prostitutas, pone de relieve que el nivel cultural de las mujeres dedicadas al comercio sexual de su cuerpo es bajo, su edad oscila entre los 20 y 30 aflos, su origen social es urbano y el 75% están descontentas de su profesión.Para la doctora Lola Bou, del centro de ETS de la Generalitat de Catalunya en Barcelona, "únicamente alrededor de un 8% de las ETS pueden atribuirse a causas derivadas de la prostitución. El resto se debe a la promiscuidad y a la falta de información".
El sociólogo Josep Vicent Marqués moderó el último de los debates. Para Marqués, que contempla la problemática desde la óptica del cliente", las prostitutas se encuadran en una doble distorsión de la sexualidad. "En el primer extremo se parte de una situación en la que la realidad sexual, llamémosla normal, no es satisfactoria ni fluida, lo que produce una demanda de prostitución, pero a su vez, sólo desde una distorsión de la sexualidad masculina puede resultar satisfactorio recurrir a la prostitución como solución del deseo sexual".
Marqués sostiene que "aunque pueda haber prostitución masculina, el arquetipo de la prostituta responde a un modelo de mujer y, además, pobre".
El sector social objeto de los debates contó con la presencia de prostitutas de Madrid y Valencia. Precisamente estas últimas dieron a conocer un comunicado en el que reclaman un marco legal que les dote de asistencia sanitaria, regulacion laboral, recursos sociales tales como guarderías, así como "más atención policial a la hora de denunciar abusos cometidos contra nosotras".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.