Principales conclusiones

Las conclusiones del estudio elaborado por el CIS son:1) El núcleo central de los problemas generados en torno a la OTAN es el conflicto paradójico en que se encuentra una mayoría de ciudadanos: afectivamente anti-OTAN y con una tendencia racional a aceptarla, conflicto que se relaciona estrechamente con uno de identidad profunda sobre el papel de España en el mundo de hoy.

Este conflicto paradójico (amén de otras causas) hace relativamente imprevisibles las tendencias de voto en el referéndum.

Sintéticamente se podrían situar las siguientes tendencias:

- Los conservadores dudan entre el sí y la abstención, al considerar el referéndum algo que sólo afecta, a los socialistas. (Podrían significar entre un 15% y un 20% de sí.)

- El no a la OTAN se centra (como voto) en los sectores más militantes y de izquierda (podría significar otro 20%).

- La mayoría afectivamente contraria a la OTAN previsiblemente se abstendrá, con dos minorías significativas a favor y en contra respectivamente. (Podría evaluarse que a medio plazo en este grupo los síes superarían a los noes.)

2) Afectivamente, la mayoría social es contraria a la OTAN por la americanización con que se percibe este pacto, y por los incrementos de tensiones y gastos militares que parecería implicar su ingreso.

Racionalmente existiría una tendencia a la aceptación de la permanencia, basada: a) en lo negativo, por las presiones internacionales; b) en lo positivo, por las posibles contrapartidas que implicaría la permanencia (especialmente, la CEE).

La existencia de estos núcleos actitudinales y argumentales paradójicos, es lo que repercutiría directamente en la imprevisibilidad de los resultados, y en la no cristalización de conductas y opiniones firmes en la mayoría social.

En este sentido la polaridad sí/no a la OTAN actuaría como expresión que cierra las posibilidades de razonamiento y argumentación. Los afectos se condensarían en esta dicotomía e impedirían la evolución de las actitudes.

En cualquier caso, la aceptación racional tiene siempre un carácter resignado y represivo.

3) Las percepciones y opiniones sobre la OTAN vendrían enmarcadas en un contexto caracterizado por:

a) La economía es la base de las relaciones internacionales.

b) La actual situación mundial está polarizada en dos bloques dominados por EE UU y la URSS.

c) Europa se presenta como la vía de acceso e integración definitiva de España a los países adelantados civilizados y modernos.

d) Predomina en los grupos una actitud pragmática-adaptativa que implica la aceptación de la realidad tal cual es.

Este marco implicaría que España tiene que incorporarse a Occidente, vía Europa, y que hay que aceptar los costes que esto suponga (la OTAN entre otros), en la medida en que la neutralidad (aspiración ideal) es imposible.

4) Mientras que la incorporación a Europa vía CEE significaría el lado positivo de la occidentalización de nuestro país, la integración en la OTAN sería el negativo.

5) En la medida en que la integración en la OTAN está forzada por circunstancias exteriores tendría que ser equilibrada por toda una serie de contrapartidas más positivas. Los grupos principalmente ven el ingreso en la CEE y las ayudas económicas y tecnológicas, y de modo secundario la reducción de las bases estadounidenses en España y la apertura de conversaciones sobre Gibraltar.

6) Estas mismas presiones y contrapartidas, y de modo muy en especial las primeras, y más en concreto las estadounidenses, explicarían el cambio de posición del PSOE, y más en particular de Felipe González, de su inicial posición anti-OTAN a la actual pro-OTAN.

Aunque de modo resignado, existiría una cierta tendencia a justificar este cambio de actitud del PSOE por parte de sectores centrales de la población, que en cierto modo prefiguraría su propio cambio último de posición.

7) La mayoría de los sectores significados en los grupos recuerda como promesa electoral básica del PSOE la salida de España de la OTAN, y existe un cierto margen de división de opiniones acerca de la promesa sobre la convocatoria del referéndum. Para unos es preelectoral, y, para otros, posterior. En cualquier caso, se considera que es una "obligación moral" del Gobierno realizarlo.

8) Los grupos consideran que, se convoque o no el referéndum (hay dudas al respecto), sea vinculante o no, y sea cual fuere su resultado, la posición del PSOE no se va a modificar, y que España va a permanecer en la OTAN.

9) En los grupos no existe un clima de opinión unánime de que el no va a vencer en el referéndum. Existe división de opiniones al respecto y son muchos los que piensan que puede salir sí, debido básicamente a la influencia del Gobierno sobre sectores indecisos.

10) Los grupos consideran que, ocurra lo que ocurra con la OTAN, el PSOE va a volver a ganar las elecciones legislativas, aunque no con la actual mayoría. La abstención y Adolfo Suárez (CDS) aparecen como alternativas para los que no van a volver a votar PSOE.

11) Existiría en la sociedad un problema de legitimidad de la OTAN, de modo que en las encuestas ocurriría con la OTAN lo que ocurre con AP: una sobrevaloración del no y una sobrepresentación del sí.