España respaldará en la ONU una resolución argelina favorable al Frente Polisario

España dará su voto afirmativo a una resolución argelina favorable a las tesis del Frente Polisario respecto al Sáhara, según han manifestado cualificadas fuentes diplomáticas españolas. Ayer por la tarde se esperaba que la IV Comisión de la ONU votaría de madrugada esta resolución, similar a la que en el año pasado, por vez primera, España prestó su voto.El ametrallamiento, el pasado 21 de septiembre, del pesquero español El Junquito y de la patrullera Tagomago -que costó la vida de dos marineros, y a raíz del cual el Gobierno español dictó la expulsión de los polisario residentes en España y el cierre de sus oficinas- no parece haber pesado a la hora de decidir el voto.

La resolución patrocinada por Argelia -que, como las de años anteriores, se basa en las disposiciones de la Organización para la Unidad Africana (OUA), contrarias a Marruecos- considera pendiente la descolonización del Sáhara e insta a una solución negociada del conflicto.

Según los puntos de vista de la diplomacia española, las posiciones argelina y marroquí respecto a este conflicto no son incompatibles, si bien el Gobierno de Madrid es partidario de que Rabat no se niegue a dialogar con el Frente Polisario.

El voto favorable de España, el 28 de noviembre de 1984, de una resolución similar irritó al Gobierno de Marruecos. Hasta aquel momento España había optado por abstenerse, como hacía también la mayor parte de los países de la Comunidad Económica Europea. Aquella resolución tras ser aprobada por 90 votos a favor, 1 en contra -el de Guinea Ecuatorial- y 45 abstenciones -entre ellas la de Marruecos-, dio lugar a un llamamiento de la ONU pidiendo al Frente Polisario y al Gobierno de Rabat que iniciasen negociaciones para alcanzar el alto el fuego y convocarar un referéndum, al cual prestarían sus auspicios la OUA y la propia ONU.

Está pendiente también que en los próximos días Marruecos proponga otra resolución sobre el Sáhara a la IV Comisión, aunque, fiel a sus tesis, excluirá en la solución del conflicto el papel del Frente Polisario. Fuentes diplomáticas españolas consideran poco probable que España dé su voto favorable a esta resolución marroquí, excepto que se admita la posibilidad de introducir enmiendas.

Los ametrallamientos de El Junquito y del Tagomago crearon una fuerte tensión en las relaciones entre el Gobierno de Madrid y el Frente Polisario, decretándose finalmente la expulsión del territorio español de los miembros de esta organización y el cierre de las dos oficinas que oficiosamente mantenía abiertas en España.

El Gobierno español, después de este incidente, manifestó en diversas ocasiones que no había variado sus puntos de vista respecto al problema del Sáhara. Así lo afirmó el ministro de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez, quien dijo además que la expulsión del Polisario era lo menos que España podía hacer tras la muerte de dos españoles.