Yáñez insiste en la necesidad de que los empresarios se sumen al V Centenario
El secretario de Estado para la Cooperación Internacional y para Iberoamérica, Luis Yáñez, defendió ayer la necesidad de que los empresarios se unan a las iniciativas que se desarrollan para la celebración en 1992 del V Centenario del Descubrimiento de América. Yáñez expuso esta idea al hacer referencia a la presencia de varios empresarios en las jornadas de reflexión sobre la conmemoración, que comenzaron ayer como un apartado más de la programación de Sevilla de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo.El secretario de Estado, en la introducción del coloquio, recordó el reciente descubrimiento de que un virus fue el principal causante de la gran mortandad de indígenas en los primeros tiempos de la colonización, para afirmar que en ningún caso puede decirse que en 1492 comenzara un genocidio. Tampoco, en su opinión, se produjeron luchas tan intensas como para explicar la rebaja drástica de la población aborigen.
Yáñez afirmó que, aparte de la cuestión histórica, la conmemoración debe mirar más hacia el futuro, especialmente al proyecto de comunidad de las naciones hispánicas, y a los problemas presentes, como son la deuda exterior, el subdesarrollo de aquellas tierras o el conflicto centroamericano.
Indígenas contra Colón
En el coloquio se manifestaron las diferentes posiciones históricas que se mantienen en relación con el descubrimiento de América, algunas de ellas, especialmente críticas con la actividad española en aquél continente. Así, el profesor Nicolás Sánchez Albornoz dijo que en la conmemoración debe prestarse especial atención a los importantes grupos indígenas de la actual Latinoamérica, que son mayoritarios en algunos países andinos y Centroamericanos, para muchos de los cuales la llegada de las carabelas de Cristóbal. Colón no fue un hecho positivo.
Tampoco se identifican con el acontecimiento los descendientes de los africanos que fueron llevados a América, "y no por su gusto", dijo el profesor Sánchez Albornoz, para quien, por tanto, no debe hablarse de "descubrimiento", sino que habría que buscar un nuevo vocablo para enlazar con el sentimiento que inspira aquel hecho histórico a estos grupos.
Entre otros intervinientes, el sociólogo Jordi Borja afirmó que España no aprovecha suficientemente su capacidad de representación y de país intermediario de Europa con América, e hizo hincapié en que a la iniciativa política deben seguir las relaciones técnicas y económicas. A su juicio, no es dinero lo que suele faltar, porque los organismos internacionales disponen de abundantes recursos económicos, sino que a menudo faltan proyectos e iniciativas.
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