El rector de Valencia reivindica la "máxima autonomía"
El rector de la universidad de Valencia, Ramón Lapiedra, se definió ayer, durante su discurso en el acto de apertura del curso, a favor de un funcionamiento descentralizado y autónomo de las universidades y sus centros. Sus palabras expresaron un cierto temor ante la posible hipoteca de la autonomía por las actividades del Consejo de Universidades y del Consell Inter universitari valenciano."La solución a los peligros de funcionamiento ineficaz", dijo Lapiedra, "que residen en esta multiplicidad de instituciones de supervisión y coordinación universitarias, requiere un funcionamiento autónomo a todos los niveles". Manifestó su deseo de que "lo que se pueda decidir a nivel de cada universidad del país sea dejado al arbitrio de cada universidad".
El presidente de la Generalitat valenciana, el socialista Joan Lerma, clausuró el acto con una breve intervención. Señaló que "podemos felicitarnos" de la existencia del Consell Interuniversitari valenciano porque la "coordinación universitaria hace compatible la autonomía de la universidad con una cierta planificación" y además de esta manera se puede lograr una mejor distribución "de los escasos recursos existentes". Lerma recordó que el Programa Económico Valenciano (PEV) destina una media de 1.350 millones de pesetas anuales a las tres universidades valencianas.
También la universidad Autónoma de Madrid (UAM) celebró ayer el acto oficial de apertura del nuevo año académico con una lección inaugural del profesor Gabriel Solé, catedrático de Hacienda Pública, sobre La defraudación fiscal. El rector, Cayetano López, invitó a profesores y alumnos a afrontar el nuevo curso con optimismo, a pesar de la contrariedad que supone el no contar todavía con estatutos propios, por lo que provisionalmente la UAM tendrá que regirse por una normativa elaborada por el Gobierno.
Por su parte, el claustro constituyente de la Universidad Politécnica de Madrid, la otra universidad que todavía no cuenta con normativa propia, aprobó ayer casi por unanimidad el proyecto de sus estatutos. Asistieron al pleno 997 claustrales, superándose considerablemente el quórum necesario de 711.
