La oposición denuncia corruptelas en la Empresa Municipal de la Vivienda

El portavoz de la oposición para temas urbanísticos en el Ayuntamiento de Madrid, Enrique Villoria, criticó ayer duramente la estructura de la Empresa Municipal de La Vivienda (EMV). "El arquitecto que más proyectos ha recibido por parte de la EMV, con unos honorarios cercanos a los 50 millones de pesetas, es el esposo de la secretaria de la entidad", afirmó Villoria durante una conferencia de prensa.Según el Grupo Popular del Ayuntamiento, la Empresa Municipal de la Vivienda funciona como una empresa privada, y las obras se adjudican directamente, sin rendir cuentas ni cumplimentar los trámites que sí se exigen a cualquier otro servicio municipal.

"Es decir", añadió José María Álvarez del Manzano, portavoz del GP, "las personas que dirigen la empresa tienen todas las ventajas de los empresarios privados, pero ninguno de sus riesgos, ya que no están funcionando con su dinero, sino con fondos públicos". El líder de la oposición argumentó que las obras se adjudican "a dedo", y sacó a relucir como ejemplo el caso del esposo de la secretaria de la empresa, arquitecto, principal beneficiario de esta práctica de adjudicaciones directas.

Ni Villoria ni Álvarez del Manzano recordaban en ese momento el nombre del arquitecto, aunque, posteriormente, fuentes del GP citaron el nombre de Manuel Jiménez Catalán, afiliado al PSOE, que no pudo ser localizado a la hora del cierre de esta edición.

Por su parte, Valentín Medel, que precisamente hoy será relevado de su cargo como vicepresidente de la Empresa Municipal de la Vivienda, afirmó que si los denunciantes se ratificaban en sus acusaciones, el tema podría ser objeto de una querella.

Medel explicó que la EMV funciona como una entidad privada y se rige por la ley de sociedades anónimas. "Lo que la oposición no dice, afirmó Medel, "es que éste es el único organismo autónomo del Ayuntamiento donde el Grupo Popular tiene un consejero, Luis Álvarez".

"Efectivamente, en la empresa trabaja una secretaria cuyo marido es arquitecto", señaló Medel. "Supongo que se referirán a ellos, pero los proyectos de las obras se aprueban por el consejo de administración y no por la secretaria, y a ese arquitecto se le encargan obras por su valía reconocida, igual que sucede con otros muchos profesionales que han tenido y tienen relación con la empresa en estos cuatro años de funcionamiento".