La escasa diversificación de la red, causa del aislamiento mexicano

La concentración de la red internacional de comunicaciones de México en una sola central, la de México-San Juan, que se vio gravemente afectada a consecuencia del terremoto, ha supuesto la práctica incomunicación telefónica del país con el exterior.Tan sólo algunas líneas fronterizas, tendidas desde el norte del país con Estados Unidos, cuyo funcionamiento no estaba canalizado a través de la central dañada, han seguido funcionando.

Básicamente, la estructura de comunicaciones internacionales de México se basa en el funcionamiento de la central México-San Juan, que canaliza aproximadamente el 90% del flujo de comunicaciones a la central de Tulancingo, que opera vía satélite.

La mayoría de los países intentan por todos los medios, a la hora de diseñar sus redes de comunicaciones, evitar esta centralización de las comunicaciones para no sufrir precisamente colapsos como el producido en la central de México-San Juan, instalada por la compañía sueca Ericson.

En España, por ejemplo, existen cuatro centrales telefónicas (Madrid, Barcelona, Valencia y Santa Cruz) que canalizan el flujo de comunicaciones internacionales.

Esta diversificación en el caso español va más allá al tener conectada la red, prácticamente al 50%, entre el sistema de cable submarino y vía satélite. Por otra parte, nuestro país dispone de tres centrales para las comunicaciones vía satélite.

A últimas horas de ayer la comunicación seguía siendo muy difícil con las áreas telefónicas de México cuyo código comenzaba con los números 1, 3, 4, y 8 y completamente imposible con la zona centro del país (Puebla, Acapulco y Tasco), así como con el área cuyo código empezaba con el número 5 en el Distrito Federal.

Las comunicaciones con España se estuvieron haciendo por operadora con la central de Monterrey, vía Estados Unidos.

En Ciudad de México, las autoridades han estado emitiendo contínuos informes pidiendo a la población que no ocupe masivamente los teléfonos para permitir que las pocas líneas disponibles queden despejadas. No se ha proporcionado una explicación oficial en México sobre la completa incomunicación que afecta a la capital y a gran parte del país. Las líneas telefónicas internas están ya funcionando casi normalmente.