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España piensa establecer relaciones diplomáticas con Israel el próximo 1 de enero

Francisco G. Basterra

El Gobierno español estudia seriamente la posibilidad de establecer relaciones diplomáticas con Israel el próximo 1 de enero, coincidiendo con el ingreso efectivo de España en la Comunidad Económica Europea, según pudo saber EL PAIS en Washington de fuentes del Congreso. Un alto cargo del Ministerio de Asuntos Exteriores explicó a mediados de agosto a un grupo de congresistas norteamericanos que el anuncio está próximo.

Según las mismas fuentes, este alto cargo informó también que el Gobierno socialista puede hacer coincidir los dos hechos para paliar la eventual reacción negativa del mundo árabe. La diplomacia española está realizando ya la última ronda de contactos con los países árabes previa al anuncio.Si Felipe González acepta definitivamente la idea, el anuncio oficial se haría a las cero horas del día 1 de enero, momento a partir del cual España se convertirá efectivamente en miembro de la CEE, si, como parece, se producen de aquí a entonces todas las ratificaciones del tratado en los parlamentos de los diez. La información fue facilitada por un responsable de Asuntos Exteriores a un grupo de congresistas norteamericanos en Madrid, que regresaba de un viaje a Israel. Uno de ellos, el representante de Puerto Rico en el Congreso, Jaime Fúster, afirmó en Washington que la noticia les fue comunicada por el ministro de Asuntos Exteriores, Francisco Fernández Ordóñez.

Fernández Ordóñez, que ha recibido la noticia en un momento inoportuno, ya que se encuentra en España el primer ministro egipcio, Hosni Mubarak, ha desmentido su participación en la entrevista. Pero EL PAIS ha podido saber que el ministro encargó a uno de sus hombres de confianza, que ha llevado personalmente el tema de Israel, que recibiera a los congresistas. Éstos expresaron su preocupación porque el reconocimiento no se haya producido aún y recibieron la información de que el 1 de enero es una fecha probable para el establecimiento de relaciones. La impresión obtenida por los congresistas es de que el anuncio se haría en esa fecha. La noticia del reconocimiento de Israel es esperada con impaciencia desde hace mucho tiempo por el Congreso norteamericano, donde el lobby judío posee una enorme influencia.

Represalias limitadas

El Gobierno piensa que la esperada reacción contraria al anuncio de relaciones con Israel se vería dificultada si se mezcla con el pleno acceso de España a Europa. Varios países árabes han sugerido la posibilidad de adoptar represalias limitadas en el caso de que España reconozca a Israel. Las presiones árabes no han conseguido, sin embargo, cambiar la decisión ya tomada por Felipe González y pendiente sólo de una fecha.La cuestión de Israel se tratará en el viaje que Felipe González realizará la próxima semana a Nueva York y Washington. Fuentes diplomáticas dijeron que el secretario de Estado, George Shultz, preguntará al primer ministro español por esta cuestión en la entrevista que, a petición norteamericana, celebrarán en Nueva York.

Las relaciones con EE UU, sobre todo con el Congreso, se beneficiarán por el establecimiento de relaciones con Israel. El viaje del presidente a EE UU puede servir también para cerrar la decisión sobre este capítulo inacabado de la política exterior española. Sin embargo, motivos de política interna española, y no la reacción del mundo árabe, que ya se ha hecho a la idea de la inevitabilidad del hecho, podrían hacer aún que el reconocimiento de Israel se retrasara a los primeros dos o tres meses de 1986, según una fuente diplomática española.

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