Encuentro histórico en Casablanca

Juan Pablo II concluye hoy en Marruecos su periplo africano con un encuentro histórico en Casablanca con el Amir el Muminin (príncipe de los creyentes) Hassan II, rey de Marruecos.Será la primera entrevista en un país islámico de dos representantes de estas dos religiones monoteístas reveladas: el islam y la cristiandad. Hassan II visitó ya al Papa en el Vaticano, el 2 de abril de J980, en su calidad de presidente del comité Al Qods (Jerusalén), comisionado por la cumbre islámica del año anterior.

El mundo islámico aún no está familiarizado con otras religiones y la presencia de éstas se observa siempre con recato y pudor, incluso con un exceso de celo ante todo lo que pueda parecer proselitismo cristiano, como, por ejemplo, el tañir de las campanas, prohibido en las iglesias cristianas que aún subsisten en Marruecos.

El diario comunista Al Bayane quiso dar a la visita de Juan Pablo II un carácter político y afirmó recientemente que Al Qods es una preocupación común del islam y la cristiandad.

Más militantes aún, los parlamentarios libios, que se reunieron el 7 y el 8 de julio en Rabat con los marroquíes, quisieron hacer aprobar una moción de "denuncia de la acción de la Iglesia cristiana en África como elemento de apoyo del imperialismo contra el islam". Esta moción, que hubiera enrarecido la conversación entre el Papa y Hassan II, fue evitada por los marroquíes.

El Papa celebrará hoy una misa en la escuela Foucauld de Casablanca a la que se calcula que asistirán unas 2.000 personas de la comunidad extranjera cristiana de Marruecos. Luego será recibido en el palacio real por Hassan II. Más tarde, el Padre Santo se dirigirá en el estadio Mohamed V, en Casablanca, a la juventud musulmana marroquí.

Por otra parte, las familias de los prisioneros políticos de Marruecos han dirigido una carta abierta al Papa en la que le informan de "la crítica situación en que se encuentran los nueve reclusos en huelga de hambre de la prisión de Marraquech", que llevan 57 días en huelga de hambre.

Según los familiares, los detenidos están en la sala de reanimación del hospital y fuertemente custodiados. Los presos políticos de otras varias cárceles marroquíes también se han declarado en huelga de hambre.