La concentración de bomberos en Fuenlabrada acabó en ocupación del Ayuntamiento

Más de un centenar de bomberos de 19 provincias se concentraron en la mañana de ayer a las puertas del Ayuntamiento de Fuenlabrada en apoyo a las reivindicaciones de una mayor profesionalidad del cuerpo. La mayor parte de los concentrados irrumpieron, pasado el mediodía, en los locales de la Corporación, donde poco antes se había mantenido un encuentro entre representantes municipales y miembros del comité de los trabajadores y del parque de bomberos de la localidad madrileña.

La ocupación del Ayuntamiento por parte de un grupo de los bomberos concentrados "se produjo de manera violenta y con intentos de agresión en la persona de un policía municipal y de algún miembro del equipo de Gobierno de la Corporación", según testigos. Los bomberos justificaron su actitud ante la retirada de los representantes del Ayuntamiento de las negociaciones que desde esa misma mañana mantenían con el comité de los trabajadores.En la tarde del pasado lunes, los 13 bomberos y dos miembros del comité de los trabajadores que mantenían una huelga de hambre depusieron su actitud en respuesta a la intención negociadora formulada por el Ayuntamiento, que exigía además el levantamiento del campamento que los huelguistas tenían instalado en la plaza de España de Fuenlabrada, y la retirada de pancartas alusivas al conflicto en toda la ciudad. Los bomberos aceptaron la propuesta del Ayuntamiento y se comprometieron a reanudar las negociaciones, congeladas desde hacía dos semanas ayer, a las nueve de la mañana.

Durante las dos horas en que estuvieron reunidos, el comité de los trabajadores y el Ayuntamiento acercaron sus posiciones en dos de los temas en litigio: la convocatoria de oposiciones para las plazas de cabos del cuerpo de bomberos, que se celebrarán el próximo mes de enero, y el acceso al puesto de jefe del parque de bomberos de un profesional, de acuerdo con la nueva Ley de Bases de Régimen Local. Sin embargo, las posturas siguieron enfrentadas ante la negativa del Ayuntamiento de rebajar las siete sanciones disciplinarias, que oscilan entre los tres días y el año de suspensión de empleo y sueldo.

A las once de la mañana se celebró la concentración de bomberos de distintas provincias de España, la segunda del mismo tipo en el plazo de una semana, y que consiguió reunir a más de 150 personas en las puertas del Ayuntamiento. La concentración transcurrió con toda normalidad hasta pasado el mediodía, en que se interrumpió momentáneamente el tráfico y se volvieron a instalar pancartas en las puertas del Ayuntamiento a los gritos de "Bomberos unidos jamás serán vencidos".

Después de un primer intento de ocupar los locales del Ayuntamiento, los bomberos decidieron que depondrían su actitud si los representantes del equipo de Gobierno volvían a las negociaciones, interrumpidas a las once de la mañana.

Al saber que los representantes del Ayuntamiento no volverían a mesa de negociaciones en tanto continuase la presión por parte de los bomberos concentrados, éstos irrumpieron en el Ayuntamiento en señal de protesta.

Tras los momentos iniciales, en que se produjeron brotes de violencia, un miembro del comité de empresa pidió a los bomberos que abandonaran el local para renaudar las conversaciones, que siguieron durante la tarde, sin que al cierre de esta edición se hubiera llegado a ningún acuerdo.