Mus y bocadillos sin arena

...Porque, verdaderamente, no hay manera de librarse de ella haciendo todo sobre la toalla. Una opción: la mesa playera plegable.Es lo más sencillo que se puede hacer. Las patas van libres, quedando sujetas al clavarlas en la arena, y son cortas, para que quepan dentro al plegarla. La superficie se hace con dos listones gruesos, de 35x35 milímetros, sobre los que se clavan o atornillan unas tablillas de 7x35 milímetros. Hay que recordar poner los clavos o tornillos de latón para que no se oxiden.

El tablero queda dividido en dos partes, que se articulan en el centro por medio de dos bisagras, una para cada listón grueso. Las bisagras se colocan bajo los listones en la posición que se ve en los dibujos. De esta manera, los propios listones hacen tope entre sí, impidiendo que al abrir la mesa se hunda por el centro. (Por este motivo, las bisagras han de atornillarse fuertemente.)

Las patas son listones de 25x25 milímetros, afilados por un extremo y redondeados por el otro. Así se clavan bien y pueden girar para abrirse. Articularlas a los listones gruesos, por dentro, taladrándolas y atravesándolas a la vez que los listones con un tornillo largo. Si se pone una tuerca de mariposa en el tornillo se puede apretar, dejando fijas las patas si es que no se pudieran clavar bien en el suelo (no todas las playas son de arena, ¿verdad?).

En plan bricolaje fino, recortar en las tablas de los extremos de la mesa unas asas que permitan llevarla más cómodamente. Se hacen con dos taladros separados 10 centímetros, que luego se unen con dos cortes de sierra para dar la forma de asa.

Por último, barnizar con barniz marino la madera para que la mesa dure.