La Junta de Andalucía no acepta el modelo de financiación autonómica sugerido por Cataluña

La Junta de Andalucía no comparte los planteamientos de la Generalitat y de los socialistas catalanes sobre el nuevo modelo de financiación autonómica, y rechaza que la fórmula definitiva descanse en la participación en el rendimiento territorial del impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF).

El presidente del Gobierno autónomo, José Rodríguez de la Borbolla, afirmó este fin de semana en Sevilla que la Junta no aceptaría la tesis catalana y propondría "fórmulas menos simplistas y más solidarias". En Andalucía se coincide, sin embargo, con Cataluña en las críticas al sistema actual.Rodríguez de la Borbolla ha pedido oficialmente a la Administración central una reunión de todos los presidentes de las comunidades autónomas en las que gobierne el PSOE, y de todos los secretarios regionales socialistas, para discutir el problema de la financiación de las autonomías y llegar a criterios coincidentes.

En una entrevista mantenida con los periodistas barceloneses miembros del Grupo Portada, el presidente andaluz no quiso revelar el sistema que defiende la Junta de Andalucía, amparándose en que aún no la había expuesto al presidente del Gobierno ni al ministro de Economía. Según altos cargos de la Administración andaluza, la posición de la Junta se dará a conocer en los próximos días, a través de las manifestaciones públicas de su consejero de Economía.

Rodríguez de la Borbolla avanzó, en cambio, los ejes maestros de esta propuesta, al declarar que, en su opinión, el sistema definitivo de financiación autonómica debe determinar "una atribución solidaria a cada comunidad, que tenga en cuenta variables como el nivel mínimo de servicios, extensión territoríal, índices de paro y también la presión fiscal". Una ley de servicios mínimos, para garantizar la aplicación de la media española de servicios públicos en cada comunidad autónoma, viene siendo reclamada desde hace años por el Partit dels Socialistes de Cataluña.

"No sería lógico fijarse sólo en el lRPF", afirmó el jefe del Ejecutivo andaluz, "porque se incurriría en el agravio comparativo, pues al tener los andaluces menos presión fiscal, saldríamos perdiendo. En Cataluña hará falta dinero para ampliar las autopistas, pero aquí aún tenemos que hacerlas. Si no se ejerce el principio de solidaridad, estaremos en un país con fronteras".

La Junta de Andalucía considera, según su presidente, que el diseño e implantación de un sistema definitivo de financiación autonómica, que el Gobierno central proyecta para dentros de dos o tres años, ha de tener los mismos criterios de solidaridad para cada peseta de inversión y no ha de ir en detrimento del montante global de inversiones que ha conseguido la comunidad andaluza. Andalucía cuenta con un presupuesto autonómico cercano a los quinientos mil millones de pesetas.