Massiel
ha tenido que declararse anticastrista y explicar en Miami que no es comunista para acallar las amenazas de bomba y el boicoteo de los vendedores de entradas que ponían en peligro su concierto del próximo 6 de julio. Un grupo de cubanos exiliados acusaba a la cantante de ser comunista, por haber actuado hace 18 años en en Cuba. La cantante hizo ayer una escala en Miami, dentro de su gira latinoamericana, para refutar tales acusaciones. Y afirmó que no militaba ni ha militado en ningún partido, "ni siquiera en el socialista", y que no creía "en ninguna ideología política".
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