Posición ambigua de Mitterrand en el enfrentamiento que mantienen Fabius y Jospin

François Mitterrand ha intervenido en la guerra que opone al primer ministro, Laurent Fabius, y al primer secretario del Partido Socialista (PS), Lionel Jospin, con una declaración ambigua. El presidente de la República Francesa mantiene que el PS es "libre y autónomo" a la hora de planificar su propia campaña electoral, tal y como reclamaba Jospin, pero que el jefe del Gobierno es el líder natural de la mayoría y como tal "debe explicar, proponer y atraer el interés de los ciudadanos".

Mitterrand aludió al enfrentamiento entre los dos políticos socialistas durante su tradicional visita al pueblo de Saint Brisson, cuyos habitantes fueron asesinados en 1944 por tropas de las SS. "No pienso participar en la campaña ni interferir en los asuntos del partido, pero mi opinión es que los dos tienen razón", señaló.Sus palabras fueron acogidas con cierto desasosiego por los dirigentes del PS que confiaban en el arbitraje del presidente. Los partidarios de Fabius creen que éste ha recibido un espaldarazo, y los de Jospin que el presidente ha dejado claro quién tiene que llevar la batuta en la campaña. La mayoría piensa, sin embargo, que Mitterrand ha querido deliberadamente permanecer en la ambigüedad, esperando que funcione la selección natural, y que el consejo directivo del PS, que se reúne el próximo 6 de julio para estudiar la oferta de dimisión de Jospin, se verá obligado a pronunciarse en los mismos términos contradictorios.

Por el momento, los intentos de mediación entre Fabius y Jospin permitieron que los dos políticos celebraran ayer unáentrevista, calificada de "interesante y útil" por el primer secretario del partido. Las declaraciones de Mitterrand permiten que ambos salven la cara y que disminuya un poco la tensión en el seno del PS, pero no solucionan el problema de fondo, porque el enfrentamiento entre Fabius y Jospin no es de índole personal sino ideológica.

El presidente de la República pretende, según algunos diputados de la corriente mitterrandista, conciliar las dos posturas. El reparto de papeles resultará en la práctica de una gran complejidad y puede dar lugar a nuevos malentendidos en los próximos meses.