El Ministerio de Justicia carece de medios para investigar la rehabilitación de títulos nobiliarios
El Departamento de Títulos Nobiliarios del Ministerio de Justicia carece de medios propios para la investigación de los expedientes en la rehabilitación de títulos nobiliarios, además de no contar con un experto genealogista entre sus funcionarios. El personal de este departamento se reduce en la actualidad a cuatro personas, dos de ellas del Cuerpo Administrativo y otras dos del Cuerpo Auxiliar de la Administración.
La investigación que se realiza sobre la rehabilitación de títulos nobiliarios se limita al cotejar los documentos que se aportan, según indicó a este periódico Jenaro Ferrer Valera, jefe del Servicio de Asuntos de Gracia, del que depende el Departamento de Títulos Nobiliarios. Ferrer señala que "en principio, se debe presumir de la exactitud de los documentos presentados". No obstante, "si se presentan contrarréplicas a los procesos de rehabilitación, formuladas por supuestos afectados, el examen de los documentos se profundiza", añadió Ferrer, quien admitió que tras detectarse las supuestas falsificaciones en los procesos de rehabilitación de títulos nobiliarios, que recientemente saltaron a la Prensa tras la intervención de: la Fiscalía General del Estado, "se cotejan más los documentos".No obstante, Luis Vallterra Fernández, que fue hasta febrero pasado jefe del departamento, indicó que "en el ministerio no tenemos procedimientos para detectar las irregularidades que se nos presenten". "No se realizan investigaciones", añadió. Para Vallterra, tan sólo es posible detectar un expediente irregular siempre que se presenten contrarréplicas, "ya que no existen otros medios para hacerlo". "Independientemente de esto, se han detectado a su vez expedientes mutilados, que se depositaban en los archivos del departamento", añadió el ex jefe de Títulos Nobiliarios. Vallterra agregó que los armarios donde se guardan no tienen llave, "por lo que es presumible que estén al alcance de cualquiera". Ferrer, ni desmintió ni confirmó estos extremos.
El proceso de rehabilitación de un título se inicia con la demanda del mismo presentada en el Registro General del Ministerio de Justicia, acompañada de un árbol genealógico que entronque al demandante con el título solicitado. Posteriormente se publica en el Boletín Oficial del Estado la petición y existe un plazo de tres meses desde su publicación para que los afectados presenten la contrarréplica.
El ministerio, superado este trámite, envía la documentación a la Diputación de la Grandeza de España para que emita un informe. Este organismo devuelve el expediente al Departamento de Títulos Nobiliarios, quien los examina. Pasado este trámite, Justicia envía el informe al Consejo de Estado, cuya Comisión de Justicia analiza la propuesta. Posteriormente pasa a la Casa Real para la firma de don Juan Carlos. Todas las fuentes consultadas indicaron que no se ha firmado ningún expediente de rehabilitación que no contase con la valoración positiva de los tres organismos.
Según los datos que se barajan una veintena de títulos ya rehabilitados son susceptibles de investigación por supuestas irregularidades, además de una docena más parados en fase de rehabilitación. Las irregularidades se estima que tal vez se realizaron sobre certificados de partidas de nacimiento y matrimonio falsas. La Fiscalía General del Estado, tras considerar que existen indicios delictivos, encargó al fiscal José María Paz la investigación del asunto, que procedió a ordenar una serie de registros domiciliarios.
En relación con la supuesta falsificación, Francisco de Asís López de Solé, consejero de Televisa y duque consorte de Cabra, negó "cualquier participación en los hechos que tengan carácter delictivo", reiterando su "total inocencia". "Me veo involucrado en tales acontecimientos en virtud de, las actuaciones instadas por el ministerio fiscal en la averiguación de posibles irregularidades detectadas en la documentación que se aporta en la tramitación de títulos nobiliarios", añadió. "En mi despacho profesional se, dirigen pleitos referentes al mejor derecho sobre títulos, pero la aportación de la documentación necesaria para la tramitación de los expedientes es función propia de los genealogistas, entre los que no me encuentro", precisó.
Jubilado por motivos de salud
En este sentido, Luis Vallterra, de 65 años, negó "rotundamente cualquier implicación en este asunto". A continuación señaló que en "ningún sentido he actuado de topo en la Administración para facilitar el paso por el ministerio de estas supuestas irregularidades". "Prueba de ello es mi expediente de 37 años al servicio de la Administración", agregó.A su vez negó "que fuera forzosamente jubilado el 4 de febrero pasado", como indicaron fuentes de los afectados. En este sentido, el Ministerio de Justicia informó que la jubilación fue pedida por el funcionario el pasado 15 de octubre por motivos de salud y fue aprobada por la Dirección General de Gastos de Personal del Ministerio de Economía y Comercio el pasado 27 de diciembre, "ya que la incapacidad física alegada estaba justificada", según indicó el portavoz del Ministerio de Justicia, quien agregó que el expediente de Vallterra se encuentra "limpio de cualquier falta".
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