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REACCIONES TRAS LA TRAGEDIA DEL ESTADIO HEYSEL, DE BRUSELAS

El aficionado con pistola es italiano

El aficionado con bufanda blanquinegra que acaba de descubrir el canal semipúblico británico ITV esgrimien o una pistola -que, en determinados momentos de la grabación, da la impresión de ser de fogueo; el humo que desprende el arma instantes después de producirse uno de los disparos podría confirmar esta hipótesis- es, con toda seguridad, uno de los miembros del reducido grupo italiano, al parecer de tendencia ultraderechista, que provocó en el gol norte los altercados que siguieron a la catástrofle causada por los supporters en el gol sur. La policía belga anunció ayer que había encontrado 38 casquillos procedentes de balas de fogueo en el estadio Heysel, escenario de la tragedia.La imágenes -de las que se ha extraído la fotografía que figura en esta página- fueron ofrecidas por TVE -en los últimos informativos del pasado jueves y en algunos de ayer- y por TV-3, cuyo comentarista aseguró que la ITV había confirmado que "la persona que esgrímela pistola y efectúa varios disparos es de nacionalidad italiana". La grabación se realizó desde la esquina de la tribuna principal que se encuentra junto al gol norte, reservado únicamente a seguidores italianos. En esa esquina estaba el vestuario del Juventus, mientras que el del Liverpool se encontraba justamente en el córner donde se produjo la tragedia.

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Protagagonismo

Las horas que siguieron a la desgracia (ocurrida a las 19.20) fueron de gran desconcierto y contaron con mayor protagonismo de seguidores italianos que de ingleses, que parecieron conformarse ya con el desastre que habían provocado. Hubo cerca de 15 minutos de silencio, durante los cuales los espectadores se limitaron a presenciar la evacuación de muertos y heridos; posteriormente, un reducido grupo de aproximadamente 25 italianos en el gol norte había más de 13.000 tifosi- se erigió (a las 21.10) en sujetos de los incidentes hasta casi el inicio del partido (21.40).

Mientras los ingleses, en el gol sur, se limitaban a esperar la salida de los dos equipos, el grupo de fanáticos italianos -entre los que el hombre de la pistola tuvo un claro protagonismo- logró abrir una de las vallas y tener acceso a la pista atlética, desde -la que se enfrentó a pedradas con las fuerzas de seguridad, miembros del Ejército equipados con material antidisturbios y situados detrás de la portería, a 15 metros de esos tifosi.

En un momento dado, esos mismos exaltados abrieron una pancarta de tinos 10 metros, en la que podía leerse Reds animals (Rojos animales),, que, después de recibir una fuerte ovación por parte de las dos tribunas, intentaron pasear por la pista atlética. Al dar los primeros pasos se enfrentaron físicamente con las fuerzas de seguridad y regresaron a su escondite.

Ese grupo fue el que impidió que la salida del equipo italiano (realizada a las 20.30) con fines pacificadores tuviera éxito, pues sus integrantes se abalanzaron sobre ellos para. abrazarlos, induciendo a varios centenares de tfiosi, que aprovecharon el hueco creado por los presumibles ultraderechistas para saltar a la pista de tartán que rodeaba el césped.

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