Querella por torturas del joven de Parla que sufrió una lesión en el bazo

JAVIER VALENZUELA, Los abogados de Manuel Rafael Gómez, el joven presuntamente maltratado en la comisaría de Parla y que sufrió una posterior lesión de bazo, presentaron ayer en el Juzgado de Instrucción de Getafe una querella criminal por los posibles delitos de torturas, detención ilegal, privación del ejercicio de los derechos cívicos y prevaricación. Los querellados son Agustín Moreno Payá, comisario de Parla; seis inspectores del Cuerpo Superior de Policía, y nueve policías nacionales, cuyos números de carné profesional constan en la querella.

En relación a este caso, ayer declararon ante Tesa Gamella, titular del juzgado de distrito de Parla, cinco policías nacionales de la comisaría local. Dos de ellos manifestaron que se encontraban fuera de servicio cuando conocieron la noticia de la muerte de un compañero en el atraco a un supermercado de Parla, en la noche del pasado 25 de abril. Inmediatamente se presentaron en la comisaría, vestidos de paisano, "para lo que hiciera falta". Ya en la madrugada del 26 de abril, un suboficial les dijo que fueran a vigilar el domicilio de un sospechoso llamado el Chiqui, en cuyas inmediaciones encontraron a Manuel Rafael Gómez, al que llevaron a comisaría, "no detenido, sino retenido".Otro de los policías nacionales que comparecieron ayer en el juzgado de distrito de Parla, dijo que, hacia las 10 de la mañana del 26 de abril, un inspector le aseguró que había que detener a Manuel Rafael Gómez, que hacía poco había sido puesto en libertad y se encontraba en su casa. A preguntas de la acusación particular, el funcionario manifestó que no cumplió de inmediato la orden del inspector, .porque una detención en una casa no la debe hacer un policía nacional de paisano". Sin embargo, ese agente reconoció que, en unión de otros dos policías nacionales destinados en Leganés, detuvo a Manuel Rafael Gómez en la calle, después de comer. Los tres iban de paisano. El agente dijo que detuvo entonces al joven "porque se lo encontró por casualidad en la calle".

Esos otros dos agentes de Leganes que participaron en la segunda captura de Manuel Rafael Gómez declararon el pasado sábado en el juzgado de Instrucción de dicha localidad, sin que la acusación particular tuviera noticia de ello. Uno de los abogados que han elaborado la querella , Jaime Sanz de Bremond, ha señalado que "del contenido de las declaraciones de los policías nacionales se deduce que miembros de ese cuerpo, fuera de servicio y de paisano, efectuaron, tras el homicidio de su compañero, una auténtica batida por Parla, a la caza y captura de sospechosos".

El documento de la querella criminal que ayer fue presentada en el juzgado de Instrucción de Getafe ha sido redactado por los, abogados Carlos Aguirre de Cárcer y Jaime Sanz de Bremond, entre otras, detalla las circunstancias en que se produjo la segunda detención de Manuel Rafael Gómez. Éste caminaba a primera hora de la tarde del 26 de abril por la calle de Cuenca, de Parla, cuando fue abordado por tres individuos de paisano, que le gritaron que se tirara al suelo al tiempo que uno le apuntaba con la pistola. El joven se encontraba ya en el suelo cuando alguien le golpeó con un arma en la cabeza. Le dijeron que volvían a detenerle porque 9es había engañado por la mañana".

Mal estado físico

Cuando, pasado el mediodía del 27 de abril, Manuel Rafael Gómez salió de comisaría, varios amigos, familiares y vecinos, cuya identidad consta en el texto de la querella, le encontraron en mal estado físico. El joven se acostó de inmediato en casa de sus padres y no se levantó hasta 24 horas después. La tarde del día 28 la pasó en casa de unos hermanos. El día 29 permaneció en la cama en -casa de sus padres, hasta que, mediada la tarde, sus hermanos le llevaron a cenar a la localidad cercana de Torrejón de Velasco.

El día 30 Manuel Rafael Gómez fue por la mañana al juzgado de distrito de Parla para cumplir una obligación legal. Por la tarde los dolores que padecía se hicieron insoportables y fue ingresado en el Primero de Octubre.

Los letrados Sanz de Bremond y Aguirre de Cárcer señalan que la denuncia que un hermano de su patrocinado presentó en la comisaría de Parla el 2 de mayo no fue remitida al Juzgado de Instrucción de Getafe hasta última hora del día 4 de mayo, poco antes del cierre de dicha dependencia por fin de semana. En ese tiempo el comisario de Parla y un inspector efectuaron diligencias favorables a su versión del caso.

Los hechos son, para los abogados de Manuel Rafael Gómez, constitutivos de los delitos de torturas, puesto que afirman que el querellante sufre lesiones en razón de las agresiones de que fue objeto; de detención ilegal y privación de los derechos cívicos, porque los policías no informaron de sus derechos a su patrocinado, no comunicaron al colegio de abogados los reconocimientos y pruebas de que fue objeto y no avisaron a letrado alguno para que le asistiera, y de prevaricación, porque los funcionarios practicaron diligencias sin dar traslado inmediato al juez de la denuncia presentada.