Los Reyes presidieron el solemne homenaje a la bandera

Los Reyes de España presidieron en la tarde de ayer en el palacio real de Aranjuez (Madrid) el solemne acto conmemorativo del bicentenario de la bandera española. A la ceremonia asistieron el presidente del Gobierno, Felipe González; los miembros del Ejecutivo; los presidentes del Congreso, del Senado y de las comunidades autónomas, así como amplias representaciones de los poderes ejecutivo, judicial y legislativo. La senadora Ana Miranda, del PSE-PSOE, y el diputado Ignacio Gil Lázaro, de AP, fueron los encargados de izar, en representación de pueblo español, la enseña nacional.

Don Juan Carlos, que vestía uniforme de gala de capitán general, siguió el desarrollo de la ceremonia desde el balcón del palacio orientado hacia el patio de armas. Tras la interpretación del himno nacional, don Juan Carlos recibió de manos del alcalde de Aranjuez, Eduardo García, la enseña nacional, que el jefe del Estado la entregó igualmente a los dos parlamentarios citados.Ana Miranda fue elegida para este fin por el Parlamento vasco, mientras Ignacio Gil figuraba en el acto como parlamentario más joven del Congreso. Los dos parlamentarios fueron acompañados en el izado de la bandera por .12 guardiamarinas.

Al comenzar la ceremonia, se leyó el decreto de 28 de mayo de 1785, dictado en Aranjuez por el rey Carlos III, por el que se establecía la actual enseña nacional. Igualmente, se leyó por el sistema de megafonía el artículo cuarto de la Constitución de 1978 que dice textualmente: "La bandera de España está formada por tres franjas horizontales, roja, amarilla y roja, siendo la amarilla de doble anchura que cada una de las rojas".

Fue tras la lectura de este artículo, cuando Ana Miranda e Ignacio Gil izaron la bandera, mientras'los contramaestres hacían sonar los silbatos que portaban, a la vez que se disparaban las 21 salvas de ordenanza y, por último, el himno nacional. La bandera quedó situada en el extremo del mástil de 20 metros de altura instalado para la ceremonia.

Posteriormente, compañías de la Agrupación de Tropas, con uniformes del siglo XVIII, desfilaron al son de la marcha El Abanico, compuesta por el maestro Javaloyes. A continuación, las tropas que participaron en el acto desfilaron con las seis banderas nacionales que han sido utilizadas en España desde la época de los Reyes Católicos. Finalmente, la bandera nacional fue arriada por guardiamarinas, mientras surcaban el cielo seis Mirage F-1, de la base de Los Llanos (Albacete) que lanzaron humos de colores rojo y amarillo.

La ceremonia concluyó cón un homenaje "a los que dieron su vida por España" y se interpretó el himno de oración. Por primera vez desde hace siete años, el acto anual de homenaje a la bandera se ha celebrado en un lugar diferente al, elegido para conmemorar el Día de las Fuerzas Armadas, que este año se desarrollará en La Coruña el 2 de junio.

Al finalizar la ceremonia se celebrá una recepción en el palacio de Aranjuez a la que asistieron unas 1.200 personas.

"Acto constitucional"

José Antonio Ardanza, presidente del Gobierno vasco, que presenció el acto entre Jordi Pujol, presidente de la Generalitat, y de Gerardo Fernández Albor, presidente de la Xunta de Galicia, declaró a los periodistas: "Éste es un acto constitucional y también son constitucionales las banderas autonómicas. Yo considero que es un acto importante, porque a nadie se le escapa que la enseña nacional no es que tenga excesivas simpatías entre un sector de la población vasca".

A su vez, el ministro de Defensa, Narcís Serra, señaló que confiaba en que actos como el de ayer sean vertebradores del Estado. "Yo creo" dijo Serra, .que es un acto muy positivo y ha venido muy bien que el bicentenario de la bandera haya caído dentro de la semana de las Fuerzas Armadas. No es un acto militar, sino civil. Es un acto de Estado".