Las perdidas materiales de la catástrofe superan los 1.500 millones de pesetas

A. V., Las pérdidas materiales de la catástrofe ocurrida en la bahía de Algeciras superan los 1.500 millones de pesetas, según una primera estimación realizada por expertos del sector. Los daños económicos podrían haber doblado esta cantidad si los barcos siniestrados hubieran estado cargados de productos petrolíferos en el momento de las explosiones, aunque muy posiblemente no habría habido pérdidas de vidas si esta última circunstancia se hubiese registrado.

El barco Camponavia estaba asegurado en 600 millones de pesetas en La Unión y el Fénix. Dada la situación de exceso de transportes de productos petrolíferos que existe en el mundo, el valor real del barco, o al menos el de liquidación, estaba próximo a la cantidad asegurada. Este petrolero, construido en 1973, tenía una capacidad de 6.000 toneladas de productos y en el momento de hacer explosión sólo había cargado 1.000 metros cúbicos de gasolina, con un valor aproximado de 45 millones de pesetas. En medios del sector se estima que la catástrofe alcanzó tales proporciones -porque tanto este buque, como el panameño Petrogen one, se encontraban prácticamente vacíos- al haber concluido uno la operación de descarga de nafta y el otro haber iniciado apenas la carga de gasolina. Si los buques hubieran estados llenos, los expertos creen que no habría habido explosiones, sino sólo un gran incendio, dando tiempo a los tripulantes muertos a salvarse.La capacidad del barco panameño Petrogen one era superior a 6.000 toneladas y su valor actual se estima en unos 800 millones de pesetas.

Planes de seguridad

Según José María Pons Llaser, director de la Refinería Gibraltar, de la empresa CEPSA, donde se produjo el siniestro, las medidas de seguridad de la refinería son correctas, porque "existe un plan de emergencia que sirve desde cuando hay problemas en los tanques hasta cuando se produce fuego. Por otro lado, todos los empleados de CEPSA son bomberos y una vez al año realizan pruebas con fuego real", informa Carlos Funcia desde La Línea.

La distancia aproximada del lugar donde ocurrió el suceso hasta la línea de tierra es de unos 150 metros, distancia que garantiza la seguridad, según José María Pons, quien afirma: "Más grande que este accidente no creo que lo haya, y éste no se ha propagado hasta los tanques". En línea de playa se hallan siete tanques de lastre compuesto de agua y anticontaminantes, y junto a ellos se encuentran los depósitos de los distintos tipos de crudo.

En estos momentos hay almacenados en la refinería de Gibraltar 170.000 toneladas de crudo y otras tantas de productos derivados del petróleo. El director de la refinería añadió que entre las medidas de seguridad disponen de varios coches contra incendios hidrantes cada 50 metros, capaces de conectar cuatro mangueras, de dos pulgadas y media cada una, y diez kilos de presión.

A un kilómetro de la Refinería Gibraltar se encuentra la barriada de Puente Mayorga, pedanía del Ayuntamiento de San Roque, en la que viven 3.000 personas. Muchas de ellas son trabajadores de la refinería o de la Central Térmica de Puente Mayorga, aunque también hay barrios de pescadores. Esa población fue evacuada durante algunas horas de la mañana de ayer, aunque posteriormente regresaron a sus domicilios.

No es ésta la primera catástrofe que ocurre en esta refinería. Hace tres meses reventó una unidad de Platforming, unidad que se utiliza generalmente para productos aromáticos y gasolina, lo que tuvo como consecuencia la muerte de un trabajador de La Línea de la Concepción. En este mismo mes se han producido dos catástrofes ecológicas en la bahía de Algeciras. En primer lugar el vertido de 200.000 litros de gasóleo de la factoría de Acerinox. El pasado día 19 se produjo otro vertido de 10.000 litros de gasóleo, esta vez procedente de la refinería, debido a la rotura de una manguera.