El emir de Kuwait escapa ileso a un atentado de extremistas árabes

El emir de Kuwait, jeque Jaber Al Ahmed Al Sabah, escapó con leves rasguños de un atentado realizado ayer en la capital del emirato por un conductor suicida al volante de un coche bomba. Además del autor del atentado, murieron dos guardaespaldas y un transeúnte.La acción fue reivindicada en Beirut por el grupo extremista Jihad (Guerra Santa) Islámica, que exigió la puesta en libertad de 16 terroristas encarcelados en Kuwait por cometer una serie de atentados con explosivos contra embajadas y edificios públicos, que costaron seis muertos y más de 80 heridos en 1983.

El conductor suicida embistió con el coche cargado de explosivos contra el primer vehículo de la comitiva del emir que se dirigía por la mañana, en su trayecto habitual, hacia el palacio Sief, donde se reúne el Gobierno.

Cuando subió al poder, en 1977, el jeque Jaber Al Ahmed intentó practicar una política equidistante de los países radicales y conservadores del mundo árabe, pero se fue decantando hacia las tendencias de los Estados moderados, que encabeza Arabia Saudí.

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