_
_
_
_

España, a favor de una nueva ronda de negociaciones para frenar el proteccionismo

España apoya la convocatoria de una nueva ronda de negociaciones, dentro del denominado Acuerdo General sobre Tarifas y Aranceles Aduaneros (GATT), que permita la adopción de compromisos jurídicos especíricos para frenar la corriente proteccionista que experimenta el comercio mundial. La posición española ha sido expuesta esta semana pasada por el secretario general de Comercio, Guillermo de la Dehesa, en la reunión del denominado grupo de los 18 del GATT, que ha tenido lugar en Ginebra. España se ha alineado en este sentido con la posición mayoritaria de los países de la CEE, y hasta cierto punto con Estados Unidos.

La postura del Gobierno español que representa en el GATT los intereses del denominado grupo mediterráneo (Israel, Chipre, Malta y Turquía), parte del principio, sin embargo, de que la conferencia comercial del GATT debe celebrarse coincidente, pero separadamente de la conferencia mundial sobre asuntos monetarios que patrocina el Gobierno del presidente francés, Francois Mitterrand.Para el grupo que representa España, ambos temas no deben vincularse, aunque debe reconocerse el impacto que los asuntos monetarios y financieros tienen enel comercio mundial. Pese a que la reciente cumbre de Bonn de las siete naciones más industrializadas del mundo occidental no se puso de acuerdo sobre la fecha precisa para celebrar esta nueva ronda de negociaciones del GATT, el mecanismo para su convocatoria ya está puesto en marcha. Los días 13 y 14 de este mes de mayo, el denominado grupo de los 18 del GATT celebró una reunión en Ginebra que debatió la cuestión de la fecha y el posible temario de la misma. En la reunión también se presentó un interesante estudio realizado por siete sabios dirigidos por Fritz Leutwiller, que bajo el título de Políticas comerciales para un futuro mejor, critica el proteccionismo.

Desde el punto de vista español, la nueva ronda de negociaciones comerciales dentro del GATT ofrece la ventaja de incluir en el temario propuesto no sólo los temas tradicionales de comercio (como desmantelamiento arancelario), sino también aquellos obstáculos aduaneros que no tienen este carácter, como las tasas, derechos compensatorios, barreras antidumping, etcétera.

La anulación de estos obstáculos tendría un efecto beneficioso en el comercio español con determinados países, fundamentalmente Estados Unidos, donde gran parte del volumen de exportaciones está afectado por barreras no arancelarias.

Decisión en julio

La convocatoria de una nueva ronda de negociaciones comerciales es una cuestión prioritaria en este momento en las relaciones económicas internacionales. Todas las previsiones sobre la evolución del comercio mundial durante 1985 y años siguientes, elaborados por organismos como el propio GATT, la OCDE y el FMI, son negativos y anticipan una caída a menos de la mitad en su crecimiento. De confirmarse estas previsiones, es previsible que se produzca una ralentización de la actividad económica mundial y que muchos países deudores, especialmente en América Latina, atraviesen problemas para hacer frente al servicio de su deuda.La estrategia de los países que patrocinan una nueva ronda de negociaciones comerciales -tipo a la ronda Kennedy de los años sesenta o la celebrada en 1982- es convertir el comercio mundial en motor de un posible relanzamiento económico, cuando menos, es un mecanismo de concienzacíón global de que el proteccionismo no sirve como mecanismo de defensa de los puestos de trabajo o de la actividad doméstica, sino todo lo contrario. El propósito de las nuevas negociaciones es acordar un documento que obligue jurídicamente a los firmantes.

Según lo acordado en la reunión del grupo de los 18, éste se volverá a reunir a primeros de julio para analizar la eventualidad de celebrar ese mismo mes una reunión de altos funcionarios, que tengan carácter decisorio, que elabore ya el calendario y temario precisos de la nueva ronda negociadora. Para esa fecha, además, se habrán eliminado ya dos interrogantes. Los países desarrollados habrán hecho público el documento que estudia el grupo de los diez sobre la reforma monetaria (estos países se reúnen en Tokio a finales de junio), y las naciones en desarrollo habrán fijado su posición al respecto en la prevista conferencia del grupo de los setenta y siete, organismo que representa los intereses de las naciones menos desarrolladas.España ha apoyado también en Ginebra la idea de incluir entre los temas a discutir en la próxima conferencia del GATT cuestiones nunca consideradas dentro del Acuerdo General. Se trata de los productos agrícolas, los servicios y los textiles. El capítulo textil tiene imnortantes efectos en el comercio

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_