La nueva batalla para decidir quién paga se dará en torno al IVA
G. M., El futuro impuesto sobre el valor añadido (IVA) será un factor decisivo para determinar quién cargará con el actual desequilibrio entre gastos e ingresos de la Seguridad Social por cotizaciones. Entre el próximo año y 1993, el Estado deberá elevar su aportación al sistema de un billón de pesetas a dos billones y medio. Pero los empresarios quieren, además, sustituir buena parte de sus cuotas por la mayor recaudación fiscal que proporcionará el IVA, que pagarán desde el próximo año todos los consumidores españoles.
Un desplazamiento similar al que ahora se perfila en la responsabilidad de financiar la Seguridad Social se inició en 1977, con motivo de los Pactos de la Moncloa. El instrumento fue entonces el inicio de la reforma fiscal con la implantación del nuevo impuesto sobre la renta, convertido desde entonces en la principal fuente de ingresos del Estado (un tercio).
Desde que las instituciones firmantes de aquel acuerdo expresaron por primera vez la opinión conjunta de que las cotizaciones de los empresarios eran un freno a la creación de empleo, el Estado empezó a correr con buena parte del peso de la Seguridad Social. Su aportación al sistema -hasta entonces casi nula- ha crecido en promedio Cada año cerca de un 50%, hasta el billón de pesetas previsible fiara 1986. En términos más gráficos, ha pasado a detraer mediante impuestos o déficit propio 2,50 pesetas de cada 100 que se producen en España.
Oportunidad histórica
Desde el próximo año, 5,30 pesetas de cada 100 creadas cada año en la producción serán detraídas por el Estado a través del IVA. Y los empresarios han pedido ya que todo aumento de recaudación "se destine minorar las cotizaciones empresariales a la Seguridad Social", según. una carta enviada por el presidente de la CEOE, José María Cuevas, al jefe del Ejecutivo, Felipe González. Recuerdan los empresarios que todos los proyectos anteriores de IVA le atribuían la virtud de poder cambiar cuotas por su recaudación. El propio programa económico del Gobierno socialista ha recogido esta posibilidad.
En este contexto, aunque tal aplicación del IVA ha sido descartada para 1986 -con el argumento de impedir una mayor subida de precios-, el Ejecutivo socialista está dispuesto a aplicar a dicha finalidad los incrementos de recaudación que proporcione el nuevo tributo.
El Ministerio de Trabajo ha tratado sin éxito que fuera desde el próximo año. Pero el de Economía y Hacienda, preocupado antes en afianzar el impuesto y no elevar el déficit del Estado, se ha negado a ello "por el momento".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
- II Legislatura España
- José María Cuevas
- MEH
- MTSS
- Presidencia Gobierno
- Precios
- Gobierno de España
- CEOE
- Legislación española
- PSOE
- Organizaciones empresariales
- Pensiones
- Ministerios
- Hacienda pública
- Legislaturas políticas
- Partidos políticos
- Política económica
- Prestaciones
- Finanzas públicas
- Comercio
- Relaciones laborales
- Seguridad Social
- Gobierno
- Política laboral
- Legislación