Espartaco: "`No quise salir a hombros"

LUIS M. MORCILLO, Espartaco, triunfador de la corrida de ayer, afirma que se resistió visiblemente a ser sacado a hombros por la puerta grande: "No quise", dice el torero, "porque parte del público protestaba el intento de que me sacaran por ella. Por eso", añade, "me resistí y traté de zafarme de los costaleros. Yo quería que hubiera unanimidad en el asentimiento a mi salida y traté de no aumentar la irritación de los que protestaban".

Cuando se llevaban al desolladero a Precioso, toro al que Espartaco acababa de desorejar por partida doble, el torero aplaudió durante el arrastre. Dice el matador que lo hizo "para testimoniar mi homenaje a su colaboración en el triunfo, pero no porque el toro me pareciera extraordinario, que no lo fue".

Para Espartaco, el toro, que durante la lidia embistió mejor por el pitón izquierdo, durante la faena de muleta lo hizo mejor por el pitón derecho. "En la muleta", dice, el toro iba bien por el izquierdo hacia los terrenos de fuera, pero lo hacía peor cuando lo citaba hacía dentro".

El torero de Espartinas cree que se encuentra en un buen momento. "Me parece que he cogido el sentido del temple y que he mejorado mucho con el estoque", dice. Y espera redondear su éxito en su segunda actuación, el próximo día 21.

Cuando termine la Feria de San Isidro empezará para las gentes del toro esa especie de lotería que son los premios taurinos. Este año el Palace Hotel, de Madrid, ha creado nuevos trofeos, que por haber sido reconocidos oficialmente por la Asociación Cultural Taurina (ATC) serán los que clasifiquen para la final de los premios internacionales de dicha entidad. Los trofeos son seis: a la mejor actuación de un matador en un toro; a la mejor dirección de lidia a cargo del primer espada; a la corrida más completa de la feria; a la mejor actuación de picador en un tercio completo de varas; a la actuación más completa de un subalterno en la lidia de un toro, y a la mejor y más completa actuación de rejoneador en un toro.

El jurado lo presidirá el doctor Mariano Zúmel y va a estar compuesto por matadores de toros, subalternos, rejoneadores, ganaderos, aficionados, representantes de la Comunidad de Madrid y críticos taurinos.