Duro debate Gobierno-oposición en el Bundestag
El Gobierno federal alemán y oposición mantuvieron ayer una dura polémica en el debate parlamentario sobre la reciente cumbre económica de los siete grandes en Bonn y la visita del presidente norteamericano, Ronald Reagan, a la República Federal de Alemania.Los democristianos (CDU) acusaron de nuevo a los socialdemócratas (SPD) de antiamericanismo y de favorecer los intereses de la Unión Soviética. Los socialdemócratas (SPD), por boca de su jefe parlamentario, Hans-Jochen Vogel, afirmaron que "nosotros somos amigos y aliados del pueblo americano, pero no somos los vasallos de la Administración de turno".
El debate, que duró más de cuatro horas, lo abrió el canciller democristiano Helmut Kohl (CDU) con una declaración de gobierno en la que calificó la visita de Reagan a la RFA como "un acontecimiento histórico", y la comparó con la del presidente Kennedy en junio de 1963, cuando pronunció ante el muro de Berlín la frase histórica "yo soy un berlinés". Kohl se refirió a la visita de Reagan al campo de concentración de Bergen-Belsen y al cementerio de Bitburg, y dio las gracias a Reagan por su gesto. "Eso el pueblo alemán y yo no lo olvidaremos".
El presidente del Partido Socialdemócrata (SPD), Willy Brandt, se refirió al final de su discurso al incidente del pasado domingo ante las cámaras de televisión, cuando calificó al secretario general democristiano, el segundo hombre de la CDU, Heiner Geissler, de "el mayor agitador que tuvo este país después de Goebbels". Ayer, ante el pleno del Bundestag, Brandt reconoció que "el domingo pasado, en la televisión, reaccioné de forma excesiva, pero después que el canciller federal pusiese el disco del primitivo antiamericanismo. En Renania-Westfalia, el canciller tuvo el atrevimiento de afirmar que quien vota a Rau elige el camino de la hegemonía soviética". Brandt añadió que "no somos unos bragazas y, cuando hay que hacerlo, sabemos responder", y acusó a Geissler de "envenenar la discusión política en este país".
El SPD presentó al pleno ayer dos resoluciones. Una, favorable a la iniciativa francesa para una "Europa de la tecnología", y otra, contra el embargo norteamericano contra Nicaragua. Las dos mociones fueron rechazadas con la mayoría gubernamental.
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