El Parlamento catalán censura la carga policial de Las Ramblas

El Parlamento catalán censuró ayer la actuación de los mandos de la Policía Nacional en la noche del pasado 23 de abril en la Rambla de Barcelona, "donde se utilizaron métodos agresivos que no se corresponden con el orden público". La Cámara catalana trató de la violenta carga policial producida durante la celebración de la festividad de Sant Jordi. El conseller de Gobernación de la Generalitat, Macià Alavedra, aprovechó el debate para exponer el modelo policial que va a defender ante el Ministerio del Interior.El día de la festividad de Sant Jordi, por la noche, una compañía de la Reserva General, con el pretexto de disolver una manifestación independentista no autorizada, cargó, además, contra una concentración feminista y contra los paseantes de la Rambla, que se encontraba doblemente concurrida por tratarse de la tradicional jornada del libro y de la rosa.

Alavedra afirmó que le parecía un error político grave la decisión de enviar a la Rambla una compañía de la Reserva General "que tiene unas funciones muy claras, que hay 22 en todo el Estado español y que todas ellas pasan periódicamente por Euskadi". Pese a esta crítica indirecta al gobernador civil de Barcelona, Ferran Cardenal, no se aprobó una enmienda de Coalición Popular que proponía que se censurara también a las autoridades políticas responsables.

El conseller de Gobernación solicitó a finales de abril una reunión con el ministro del Interior, José Barrionuevo, para abrir negociaciones en torno al papel que las policías local y autonómica deben jugar en el modelo policial que las congeladas leyes orgánicas que prevé la Constitución deben diseñar. Barrionuevo ha contestado aceptando el diálogo, según explicó ayer Alavedra.

La propuesta del conseller de nuevo modelo policial no fue sometida a votación, aunque sus objetivos merecieron un amplio consenso. El modelo policial defendido ayer por Alavedra parte del principio de que la seguridad pública es una responsabilidad compartida por las administraciones local, autonómica y estatal.

La estructura policial adaptada a las exigencias de la Constitución debería basarse, en el proyecto del conseller Alavedra, en una policía local que, en los municipios con población y recursos financieros suficientes, ejerciera un servicio policial básico, entendiendo por tal desde la vigilancia callejera hasta el mantenimiento del orden público durante la celebración de manifestaciones y actos multitudinarios y la intervención en delitos y accidentes. Los municipios pequeños podrían mancomunarse para constituir una policía común.