Los países industrializados buscan fórmulas para reforzar su control sobre las economías de las naciones deudoras

Los países industriales desean que el Fondo Monetario Internacional (FMI) refuerce la "función policial" que este organismo ejerce sobre las políticas económicas de las naciones deudoras e incremente el grado de vigilancia y condicionalidad con el que facilitan recursos para la refinanciación de su endeudamiento exterior.

Esta es una de las ideas fundamentales que ha surgido en los debates a puerta cerrada de los denominados grupo interino y de desarrollo del FMI y Banco Mundial, cuyas reuniones de primavera está previsto que terminen hoy en Washington.

Fuentes solventes señalaron que, en sus respectivos comunicados finales, los dos órganos se harán eco hoy de estas demandas de las naciones industriales, que buscan presionar a los países deudores para que cumplan las políticas de austeridad que sus economías necesitan como condición previa para obtener recursos adicionales del FMI.

El comité de desarrollo del FMI y Banco Mundial, que se reunió ayer, consideró una propuesta presentada por EE UU para que el Bando Mundial extienda su apoyo financiero a los países deudores que cumplen los programas económicos negociados con el FMI.

La propuesta norteamericana, que va acompañada de una sugerencia para que se resuciten los créditos oficiales a la exportación, significaría, de ser aprobada, según algunas delegaciones, una extensión del papel supervisor del FMI sobre las economías de los países miembros.

Importante resistencia

En las discusiones que han surgido en el comité interino y en el de desarrollo se ha tratado de establecer un vínculo más estricto entre la asistencia del FMI y el cumplimiento de los programas económicos. La resistencia de países como Argentina, y ahora Perú, a someter sus economías a un control férreo por parte de los técnicos del FMI ha renovado esta campaña de los países más ricos en favor de la vigilancia del FMI. Incluso un país anteriormente reacio a estas sugerencias, como es el caso de Francia, se ha unido a la campaña.En las reuniones del FMI ha causado una enorme impresión las declaraciones del dirigente peruano Alan García, candidato victorioso en la primera vuelta de las elecciones presideciales del pasado domingo, sobre su eventual rechazo de la política del FMI para Perú en el caso de llegar al poder.

En cualquier caso, no se esperan grandes cambios durante esta reunión en el tratamiento que el Fondo Monetario ha dado al problema de la deuda (estrategia caso por caso), pese a que países como Argentina y Brasil arrastran estos meses intereses vencidos en su deuda exterior por importe superior a los 1.000 millones de dólares.

Argentina está previsto que inicie este fin de semana negociaciones con el FMI para que éste reanude sus entregas de fondos, interrumpidas hace un mes, cuando el organismo internacional entendió que el programa económico del Gobierno de Raúl Alfonsín no funcionaba.

Próxima reunión

La idea de una mayor supervisión de las políticas económicas de los países miembros del FMI será definitivamente diseñada por el denominado grupo de los diez (naciones más industrializadas del mundo) cuando se reúna en Tokyo el próximo 21 de junio.En esa fecha está previsto que el grupo haga público su informe sobre el funcionamiento del sistema monetario mundial y recomiende, lejos de grandes reformas del mismo, una serie de cambios que permitan un reforzamiento de las actuales políticas. Este informe, que está prácticamente terminado, cuenta con la oposición de Francia dentro del grupo, que quiere que se haga una mención a la necesidad de volver al patrón oro.