África, un continente en movimento
El establecimiento de fronteras en África, a finales del siglo pasado, supuso la implantación de barreras a los hasta entonces tradicionales movimientos de las poblaciones indígenas.Las administraciones coloniales crearon los primeros refugiados que huían del reclutamiento forzoso para los cultivos de algodón en Alto Volta, la construcción de líneas de ferrocarril o el alistamiento en ejércitos de los Gobiernos centrales.
Fue, sin embargo el proceso de descolonización, comenzado a finales de los cincuenta, el que disparó el número de refugiados en África. La arbitrariedad de las fronteras coloniales, trazadas sin tener en cuenta criterios culturales, étnicos y geográficos, contribuyó a exasperar las rivalidades étnicas que sirvieron de marco a guerras civiles, que en algunos casos se complicaron con la intervención de potencias exteriores.
La inestabilidad sigue siendo la principal característica de este continente, donde los conflictos internos, los regímenes totalitarios y los efectos de la sequía han generado unos cinco millones de desplazados.
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