Un juez de Alcalá de Henares concede el primer 'hábeas corpus' a un preso

El titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Alcalá de Henares, Modesto de Bustos Gómez-Rico, ha concedido el primer hábeas corpus solicitado por un preso. El pasado viernes, día 29, dictó un auto por el que se concedió el hábeas corpus (derecho del detenido a ser oído ante el juez) al interno en la prisión de máxima seguridad de Alcalá-Meco Juan Carlos Cabrero del Olmo, presentado por su madre a raíz de las "palizas" que, según constaba en la petición del hábeas corpus, había recibido por parte de los funcionarios.

MadridEl juez ha acordado en el mismo auto que se deduzcan testimonios para incoar el oportuno procedimiento contra los funcionarios responsables que se hallaban de guardia. El preso deberá quedar de momento bajo la custodia de personas distintas a estos funcionarios que han sido denunciados. Los funcionarios prestaban servicio en el módulo de aislamiento de la citada prisión, donde se encontraba el recluso los pasados días 25 y 26 de este mes, cuando recibió la paliza, según consta en la denuncia.La solicitud fue presentada por la madre de Juan Carlos Cabrero del Olmo a primera hora de la tarde del día 28. Según fuentes de la defensa del caso, una vez admitida dicha solicitud a trámite por el juzgado, el titular del mismo acordó la puesta a su disposición del preso, que fue conducido ante el juez a las seis de la tarde de ese mismo día. Tras prestar declaración y mostrar las señales que podían apreciarse en su cuerpo, el interno fue trasladado a la casa de socorro más cercana, donde fue reconocido por el médico de guardia.

Ante estos hechos, el juez citó para la mañana siguiente, día 29, al director de la prisión y a los funcionarios responsables, quienes prestaron declaración mientras Juan Carlos Cabrero era sometido a un nuevo reconocimiento médico, esta vez por el médico forense del juzgado. Horas más tarde, el juez dictó el auto en el que admitía el hábeas corpus y comisionaba a los agentes de la Policía Nacional para que notificaran la resolución a la dirección de la prisión.

José Antonio Pérez Andrés y Jaime Sanz de Bremond, abogados de la familia de Juan Carlos Cabrero, han declarado que "éste no es un hecho aislado en la prisión de Alcalá-Meco, y especialmente en el módulo número 3 de la misma. Se tienen noticias de otros hechos idénticos o parecidos de funcionarios que han golpeado a los presos y que les han aplicado aerosoles de gases tóxicos paralizantes, tal como sucedió en el caso de Juan Carlos Cabrero".