Francia hace fracasar la maratón negociadora para el ingreso de España en la CEE

El Consejo de Ministros de Asuntos, Exteriores de la Comunidad Económica Europea (CEE) quedó suspendido sorpresivamente poco antes de la medianoche de ayer, sin alcanzar acuerdo alguno con España y Portugal sobre el tema de la ampliación. Las dos partes volverán a reunirse el próximo jueves, en la víspera de la cumbre de jefes de Gobierno y de Estado de la CEE. Según el ministro de Asuntos Exteriores español, Fernando Morán, no puede hablarse de ruptura, pero "Ias posiciones de ciertos países son muy duras". Andreotti anunció oficialmente el aplazamiento.

Durante todo el día de ayer se desarrollaron las negociaciones en un ambiente de optimismo, hasta tal punto que a media tarde el ministro de Asuntos Exteriores italiano, Giulio Andreotti, había encargado champaña para los negociadores.Willen van Eekelen, secretario de Estado para Asuntos Exteriores de Holanda, declaró a la salida de la interrumpida reunión: "Esperamos llegar a una solución (en el encuentro del próximo jueves). En caso contrario, no habrá cumbre". El ministro holandés se refería a la cumbre de jefes de Estado y Gobierno de los diez, prevista para comenzar el viernes día 29.

Poco antes del anuncio de Andreotti, el ministro de Asuntos Exteriores español, Fernando Morán, había expresado "la esperanza de que antes de las tres de la madrugada hayamos cerrado" las negociaciones. Sin embargo, al filo de la medianoche todo cambió. Francia reconsideró lo tratado y no se llegó al acuerdo por una diferencia de cinco barcos y 300.000 hectolitros de vino. Algunas fuentes .consultadas vincularon la ruptura a las manifestaciones que agricultores de toda Francia -en número de 60.000, según los sindicatos- realizarán hoy en protesta por los precios agrarios de la Comunidad.

En la delegación negociadora española y en los ambientes políticos y económicos de Madrid se respiraba durante toda la tarde de ayer un ambiente de euforia contenida, a la espera del resultado final e irreversible de las negociaciones. Algunos dirigentes políticos incluso llegaron a brindar con champaña. El presidente del Gobierno, Felipe González, preparaba una intervención televisada, que quedó pospuesta, ante el retraso del acuerdo final, hasta altas horas de la madrugada.

Por todo ello, la suspensión de las negociaciones sin lograr el acuerdo cogió por sorpresa a la delegación española en Bruselas. Morán, medio minuto antes del anuncio de la suspensión, había afirmado que "no hay ruptura y creo que podremos llegar a un acuerdo esta noche". El ministro, que llegará al mediodía de hoy a Madrid, convocará inmediata-, mente a los embajadores en Esparla de Francia, República Federal de Alemania e Italia para tratar de acercar posiciones de cara a la sesión del jueves próximo. Morán declaró que, "tras un análisis es probable que España asista a la negociación", pero no lo dio por seguro. "No creo que en este momento España tenga que llamar a la puerta de nadie", finalizó.

El Gobierno español tiene preparado un acto protocolario para la firma del acuerdo de adhesión definitivo, considerado como una verdadera operación de Estado. La firma se realizará en Madrid y asistirán a ella el rey Juan Carlos, todos los partidos políficos y los presidentes de las principales instituciones españolas.

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