Un vigilante muere en Granada jugando a la ruleta rusa

El joven Manuel Rodríguez Arenas, de 23 años de edad, perdió la vida la madrugada del pasado viernes en la fábrica de pólvora de Santa Bárbara, de la que era empleado, mientras se hallaba jugando con su pistola de vigilante a la ruleta rusa.

Los hechos ocurrieron en Granada hacia las dos de la madrugada, cuando Manuel Rodríguez, que se hallaba de guardia en el polvorín conocido como Cortijo Nuevo, junto a la fábrica, después de limpiar su arma, un revólver del calibre 38, le sacó todos los proyectiles y dejó sólo uno, diciendo a un compañero que se hallaba cerca que iba a jugar a la ruleta rusa.

Tras un breve espacio de tiempo, se escuchó una detonación, y cuando se acercaron al lugar dos de sus compañeros que se hallaban en puestos de vigilancia próximos, encontraron en el suelo el cuerpo de Manuel, que tenía la cabeza destrozada.